La subida de precios de los alimentos eleva la inflación al 1,7% en mayo

Dentro de este grupo, cuya tasa anual se elevó ocho décimas hasta el 3,4%, destaca el encarecimiento de las frutas frescas, legumbres y hortalizas frescas, frente a la bajada en mayo de 2012.

En el IPC también influyeron los precios del ocio y la cultura, que aumentaron un punto hasta el 1,6%, especialmente por el viaje organizado, que, aunque bajó, lo hizo en menor medida que el año anterior.

En cuanto al transporte, bajó al 0,1%, seis décimas, porque la disminución de los precios de carburantes y lubricantes ha sido menor este año que el pasado.

Con respecto a la vivienda, subió el 0,1%, cuatro décimas menos, por los precios del gas que crecieron menos que el año pasado, y los del gasóleo para calefacción, que bajaron.

La tasa interanual no varía respecto al indicador adelantado del IPC que el INE publicó el pasado 30 mayo.

Por rúbricas, destacan las subidas interanuales de los medicamentos y material terapéutico (27,4%), las patatas y sus derivados (24,3%), aceites y grasas (23,2%) y la educación universitaria (22,3%).

La inflación subyacente -que excluye la variación de los precios de los alimentos frescos y la energía- aumentó una décima hasta el 2 %, lo que supera en 0,3 puntos el IPC general.

Respecto a abril, el IPC subió el 0,2%, especialmente por los precios del vestido y calzado, que se incrementaron el 2,2% ante la temporada de primavera-verano.

En la tasa mensual también repercutieron los alimentos y bebidas no alcohólicas, que subieron el 0,6%; el menaje, con un alza del 0,4% por los precios de los muebles, artículos textiles para el hogar y los de limpieza.

La inflación anual subió en todas las comunidades, especialmente en Cantabria (2,8%), Galicia (1,8%), y Castilla y León (1,7%), con un aumento de cinco décimas en cada una.

El menor incremento, de una décima, fue para Baleares, donde el IPC interanual se situó en el 1,8%.

El INE también ha publicado el índice de precios de consumo armonizado (IPCA) que subió tres décimas, hasta el 1,8%, y el IPC a impuestos constantes (que indica lo que se hubieran incrementado los precios en caso de que los impuestos no hubieran variado), que bajó el 0,3%, dos puntos por debajo del índice general.