Nadal: «Si no fueran los Juegos, no estaría aquí»

Tiene grabada en la cabeza la recta final de Fermín Cacho. Era muy pequeño, reconocía, pero las imágenes de Barcelona 92 se quedaron clavadas para siempre. Y con ese sentimiento creció Rafa Nadal hasta que llegó la oportunidad de vivir sus primeros Juegos Olímpicos. Fue en Pekín 2008. Cara sonriente y felicidad se reflejaban en ese Nadal que hoy regresa más maduro y consciente de que la cita cada cuatro años es muy volátil.

«La recuperación ha sido más acelerada por ese motivo, claro. La muñeca a nivel de imagen está bien, pero hay molestias y la recuperación se ha acelerado . Si no fueran los Juegos, no estaría aquí», confesó el tenista, líder de un grupo que aspira a varias medallas entre individuales y dobles . Todos quieren hacerlo bien, pero sobre todo, quieren disfrutar. «Compartir momentos con otros deportistas de otros deportes es algo muy grande porque se ve la realidad de qué es el deporte en sí, porque nosotros vivimos en una nube. Da valor a todos porque solo se vive en unos Juegos Olímpicos».

Y en esta cita quiere dar el resto. No solo como tenista sino como profesional del deporte. «No fue decisivo, pero sí fue un plus para estar aquí pser el abanderado. Es una satisfacción y se lo agradezco a las personas que pensaron en mí. Aunque no soy líder de nada, soy uno más, solo iré delante. Renunciar a ser abanderado dos veces seguidas hubiera muy duro», aseguraba el campeón de nueve Roland Garros. Y perderse ese torneo por la lesión de la muñeca fue lo más duro que ha pasado este año. «Una vez que te pierdes el torneo para el que más te preparas, o al menos el que es referencia en mi calendario, o siguiente más difícil fue la incertidumbre de saber cómo llegaría aquí », admitía.

Sin embargo, ya está en la Villa Olímpica, recibiendo los halagos de sus compañeros deportistas y parándose con a uno de los que le solicitan una foto. « El premio es estar aquí . Una felicidad muy grande porque hace dos semanas lo veía muy complicado. La lesión no iba a más, pero ya lo sabe la capitana, que no iba tampoco para mucho mejor». Pero el balear lidera a un grupo de tenistas españoles que pueden hacer grandes cosas en estos Juegos. Nadal no los lidera, como dice, pero sí saldrá delante en el desfile inaugural. Otro de los recuerdos que se le quedó grabado en la mente de aquella Barcelona 92. De aquellos recuerdos, surgen estas ganas de competir en una cita tan difícil: «Es la competición máxima del deporte. El evento más difícil de jugar y de ganar porque son cada cuatro años, son muy pocas ocasiones en la vida de un deportista». Disfrutó Pekín y se ausentó en Londres por lesión, pero no quería volver a perdérselos y los aprovechará por triplicado.