Hazte premium Hazte premium

¿Por qué España nunca gana más medallas que en Barcelona 92?

La implantación del Plan ADO fue decisiva para que hace 24 años nuestro país alcanzara el sexto puesto del medallero

Vídeo: Ellos son los héroes españoles de Río David del Río

A. S. M.

Con el telón de Río 2016 bajado, la delegación española vuelve a casa con 17 medallas en su haber . Una cifra sólo superada por Barcelona 1992 (22), Atenas 2004 (20) y Pekín 2008 (18), e igualada por Atlanta 1996 y Londres 2012, y que supone para España la segunda mejor participación de su historia en cuanto a oros, con siete, solo superada por Barcelona con 13. Con estos números resulta evidente que los réditos obtenidos en el país carioca son los mejores desde que hace 24 años la Ciudad Condal acogiera los primeros Juegos de la historia en nuestro territorio.

A pesar de la notable gesta, con un sprint final digno del propio Usain Bolt, nuestros atletas han vuelto a quedar lejos de los metales cosechados en el ya mágico verano del 92 . ¿Por qué ocurre esto? ¿Cuál es la razón por la que España es incapaz de acercarse a su techo olímpico? Un mayor número de deportistas españoles, unido a la motivación de jugar en casa o el apoyo del público fueron algunos de los factores determinates. Pero por encima de todo, por novedoso y eficaz, hubo uno que sobresalió: el Plan ADO .

Antes de 1992, el equipo español nunca había ganado más de un oro en unos Juegos. Una penalidad que las autoridades de la época no estaban dispuestas a volver a asumir, toda vez que el 17 de octubre de 1986 Juan Antonio Samaranch , presidente entonces del Comité Olímpico Internacional, dio a conocer en la ciudad suiza de Lausana que «la ville de... Barcelona» era la elegida para organizar los Juegos de la XXV Olimpiada por delante de París, a la que derrotó en la tercera votación por 47 votos a 23.

Con esta idea, solo dos años después de aquella votación nació el Plan ADO. Todavía hoy vigente, este Programa nació como una asociación sin ánimo de lucro compuesta a partes iguales por tres socios, TVE, COE y CSD , y que tenía por objetivo la financiación y preparación de aquellos deportistas españoles que, conforme a criterios técnicos nacionales, estuvieran en situación de realizar un buen papel en los Juegos Olímpicos.

Los fondos, recibidos de diferentes empresas patrocinadoras, tenían como destino las becas a atletas —liberándoles de toda carga más allá de la máxima dedicación al entrenamiento —, la adquisición de material deportivo en perfecto estado, la contratación de reputados técnicos nacionales y extranjeros, facilitar la concentración y la asistencia a las competiciones internacionales de máximo nivel y el seguimiento técnico y el apoyo médico de los deportistas becados.

Un proyecto que tocó cima en Barcelona y que desciende lentamente cada vez que empieza una Olimpiada. A pesar de que en Atlanta 96 se consiguió perpetuar la idea de que extender el ADO era necesario, la delegación española sufrió un descenso del presupuesto para preparar su participación. Desde entonces el Plan ha sufrido altibajos, siempre lejos de los niveles de su nacimiento. De igual forma, en Atlanta, Sidney, Atenas, Pekín, Londres y Río la cosecha de medallas se ha mantenido estable, siempre lejos de la obtenida por los Fermín Cacho, Martín López-Zubero, Daniel Plaza y el resto de una delegación que cambio el rumbo de nuestro deporte olímpico.

Fermín Cacho levanta los brazos tras ganar el oro en la final de 1500 metros EFE

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación