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Bula para el ramadán

Los musulmanes de Francia, Bélgica y otras selecciones pactan no ayunar durante el torneo para recuperar los días perdidos fuera de la competición

FERNANDO ITURRIBARRÍa

El ramadán comenzó el lunes y finalizará en torno al 5 de julio. El mes de ayuno de los musulmanes coincide con la Eurocopa. Esta concomitancia plantea un problema de conciencia a los futbolistas de fe mahometana participantes en el torneo. No comer ni beber desde el amanecer hasta la puesta de sol amenaza con mermar su rendimiento físico bajo el calor veraniego. En selecciones como Francia y Bélgica, los practicantes del Corán tienen bula para no cumplir el ramadán durante la competición y recuperar los días de ayuno en otras fechas. Otros conjuntos, como Turquía y Albania, dejan la libre opción a los afectados caso a caso.

Entre los 23 ‘bleus’, hay tres musulmanes practicantes: N’Golo Kanté, Paul Pogba y Bacary Sagna. Son titulares y han decidido no ayunar en la Eurocopa. Un cuarto, Moussa Sissoko, es suplente. En la lista inicial del seleccionador, Didier Deschamps, había otro, Lassana Diarra, baja por lesión de última hora. Un problema con la reglamentación antidopaje apartó a un sexto, Mamadou Sakho. Los seis son de origen subsahariano, un argumento de peso para Deschamps contra las acusaciones de racismo. Las declaraciones incendiarias de Eric Cantona que dieron pie a la infamia le reprochaban haber descartado a Hatem Ben Arfa y Karim Benzema. Los dos son musulmanes, pero oriundos del norte de Africa.

Según el diario ‘L’Equipe’, la decisión de no cumplir el ayuno tradicional se ha tomado de común acuerdo con los responsables técnicos de la selección francesa. Un acuerdo similar se pactó en el Mundial brasileño de 2014, que también coincidió con el ramadán. Entonces Sagna declaró que “personalmente no hago el ramadán pues sería peligroso llegar al campo con carencias alimentarias”.

En Brasil cinco jugadores de la selección argelina optaron por ayunar. La iniciativa obligó al cuadro técnico a elaborar una preparación a la medida, en especial para evitar la deshidratación. “Es un período en que el riesgo de lesiones aumenta, especialmente a nivel de las lumbares, de las articulaciones y los músculos”, observó el doctor Hakim Chalabi, médico de Argelia. “Hay que modificar la alimentación para adaptarse al ejercicio. Los jugadores deben hidratarse mejor. Les aconsejamos que prolonguen la duración de la siesta para recuperar una parte de su tiempo de sueño perdido en la ruptura del ayuno”, comentó.

Pogba ha colgado estos días en Instagram una foto suya haciendo un donativo en una sala de oraciones. En el mensaje anexo, desea “un buen ramadán a todos mis hermanos y mis hermanas, que Dios perdone nuestros pecados y acepte nuestras plegarias”. “No odiéis al prójimo, amadlo”, finaliza el mensaje sin ninguna alusión al ayuno.

El futbolista alemán de raíces turcas Mezut Özil, que ha publicado en las redes sociales una foto de peregrinación en La Meca, ha hecho saber que aplazará el ayuno este año. En la selección de Bélgica, Marouane Fellaini y Moussa Dembelé también han decidido recuperar el ramadán después del torneo.

Albania, país de mayoría musulmana, ha dejado la elección en manos de cada jugador. Tendrán que enfrentarse a Francia el próximo miércoles en la calurosa Marsella a las nueve de la noche, antes de la puesta de sol, prevista ese día a las 21.12 horas. Turquía también ha optado por respetar la libertad de conciencia.

El exinternacional francés Abou Diaby, centrocampista del Olympique de Marsella, no ayunaba cuando jugaba. “Pero se sentía culpable y decidió no romper el ayuno los días de partido. Desde entonces sostiene que se siente mejor y que eso le hace mejor”, apunta el periodista francés Nicolas Vilas, autor del libro ‘Dieu football club’.

El rector de la Gran Mezquita de París, Dalil Boubakeur, no entra en el debate de si los futbolistas deben o no ayunar. “Si quieren y pueden que lo hagan. Si no lo hacen, es algo entre el jugador y el Señor que juzgará. Pero el jugador deberá sustituir cada día perdido por otro en caso de imposibilidad”, ha declarado a Saphir News.

El Corán y los textos del derecho musulmán prevén dispensas para los enfermos, las personas mayores, las mujeres embarazadas y los viajeros. Según algunas interpretaciones, también están dispensados los trabajos penosos, incluidos los deportistas de alto nivel sobre todo si compiten en verano cuando cae tarde la noche. Pero deben compensarlo con donativos o buenas acciones.

Deschamps asegura que la religión no interfiere en el día a día de la concentración. “Nuestra prioridad es que los jugadores se sientan bien. En la vida del grupo hay momentos en que se encuentran solos. No tengo que entrar en su intimidad”, alega. Bajo su dirección, se ha instaurado un bufé de comida halal para que los musulmanes cumplan con los preceptos rituales en su alimentación.

La convivencia entre las diferentes creencias es buena en el seno de los ‘bleus’, una vez superados los clanes por religiones de antaño. El protestante Eliaquim Mangala dice que “todas las mañanas agradezco a Dios por tener todo lo que he tenido hasta ahora”. Olivier Giroud, que luce una cruz tatuada; André-Pierre Gignac, de etnia gitana; y Yohan Cabaye, lector habitual de la Biblia, son católicos practicantes. También lo es Anthony Martial, la joven estrella del Manchester United. “Si hoy estoy aquí no es solamente gracias a mí o mi familia, sino sobre todo gracias a Dios”, confiesa.

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