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La Premier de los entrenadores

La liga inglesa arranca hoy con Mourinho y Guardiola como protagonistas del potente listado de entrenadores que presenta para la temporada 2016-2017

AFP

Alejandro Díaz-Agero

La Premier League 2016-2017 nace como una de las versiones con mayores expectativas del campeonato inglés moderno que las islas británicas hayan presenciado. La llegada de varios primeras espadas de los banquillos como son José Mourinho, Pep Guardiola o Antonio Conte , sumadas a los reclutamientos de Zlatan Ibrahimovic, Paul Pogba o Ilkay Gündogan , dibujan un campeonato apasionante en el que resulta muy complicado diferenciar un claro favorito al título.

Resulta tan absurdo descartar al último campeón del torneo inglés como volver a situar al Leicester entre los 3 principales candidatos a levantar la Premier el próximo 21 de mayo. Es cierto que el esqueleto de la plantilla que salió campeona se mantiene intacto, con la salvedad de la marcha de N'Golo Kanté al Chelsea, pero también lo es que faltan dedos en una mano para contabilizar equipos con mayor potencial para sumar de tres en tres con mayor asiduidad a lo largo del año. Falta comprobar el impacto que tienen Mendy (que llega para hacer de Kanté) y el rapidísimo Musa en el entramado de Ranieri.

El prometedor duelo que presentan Mourinho y Guardiola en Manchester aspira a presentar a los dos equipos más poderosos del campeonato. El primer motivo es el cariz de sus entrenadores, garantías absolutas para formar equipos de primerísima línea, y cuya rivalidad (tanto personal como entre clubes) potenciará aún más las cualidades de sus colectivos. Ambos técnicos cuentan con los jugadores más resolutivos de Inglaterra, esos que ayudan a sumar victorias incluso cuando el buen juego no acompaña. Ibrahimovic, Rooney o Pogba en el United , y De Bruyne, Agüero o el incipiente Sané en el City , darán prueba de ello.

En el camino encontrarán escollos de categoría. El Chelsea de Conte, sin grandes revoluciones en cuanto a futbolistas ( Kanté y Batshuayi ), confiará al entrenador italiano las llaves de su nuevo proyecto. Tampoco se lo pondrán fácil Klopp y su Liverpool , que sin sumar fichajes de renombre ( Wijnaldum, Mané o Matip ), arrancan la temporada con las ideas del ex del Borussia Dortmund ya asimiladas, el arma más importante para una institución en la que su entrenador es la estrella. El Arsenal tratará de evitar que las lesiones mermen a un talentoso plantel de futbolistas cuya competitividad para aspirar a cosas importantes aún no se ha confirmado. La llegada del suizo Xhaka aportará un salto de nivel a una medular que el curso pasada quedó excesivamente mermada con la baja prolongada de Santi Cazorla . La continuidad de ambos, sumada a la llegada aún pendiente de un central y el compromiso de Özil y Alexis Sánchez , son las variables que dictaminarán hasta dónde llega este año el proyecto de Arsène Wenger . Tras competir hasta el final el último título, el Tottenham de Pochettino cierra el capitulo de aspirantes. Confía el argentino en el mismo grupo de jóvenes futbolistas para volver a asaltar los puestos de Champions. Disputar la máxima competición europea entre semana podría planteársele como un obstáculo importante para rendir en la competición doméstica. Como complementos a los Kane, Alli o Dier , los «Spurs» han contratado al pivote keniata Wanyama y al delantero holandés Janssen , que viene de sumar 32 tantos en la Eredivisie.

Apuntan a más

Tanto el West Ham como el Everton se presentan como equipos con capacidad para dar un susto a cualquiera. Los primeros ya estuvieron a punto de colarse en la previa de la Champions en la 2015-2016, y han sumado a su ya sugerente plantilla jugadores interesantes como Ayew o Feghouli . Los «toffees», que además de a Koeman como técnico han incorporado al director deportivo del Leicester (descubridor de Kanté o Mahrez). La pérdida de Stones ha sido notablemente reparada con el fichaje del capitán de Gales, Ashley Williams , y la llegada de Bolasie supone tener a uno de los jugadores que mayores quebraderos de cabeza traen a los gigantes de la Premier cuando dejan espacios a su espalda.

La continuidad que están teniendo proyectos como los del Southampton o el Stoke invita a pensar que también pueden protagonizar importantes sorpresas en la competición que arranca este 13 de agosto. El Bournemouth , equipo de Premier League desde la temporada pasada, ha reforzado sus filas con jóvenes como Aké o Ibe (fichado por 18 millones del Liverpool) que, de romper a jugar, pueden servir para elevar considerablemenete las aspiraciones de su club.

Zona baja

Equipos como el Crystal Palace o el West Bromwich Albion no deberían pasar apuros para mantener la categoría. La falta de calidad diferencial en sus plantillas, unida a la falta de refuerzos que ayuden a mejorar el nivel lucido el año pasado, podría terminar pasándoles factura si el comformismo (no son candidatos a bajar pero tampoco tienen visos de coquetear con la mitad alta de la tabla) tocara a su puerta.

Abocados a pelear por alejarse de los puestos en rojo parecen también el Sunderland , salvado milagrosamente por el hoy seleccionador inglés Sam Allardyce , el Swansea , que intentará la replica de lo conseguido de la mano de Michu con los también españoles Fernando Llorente y Borja Bastón , y el Watford de Mazarri , que tendrá difícil repetir el notorio rendimiento que sacó Quique Sánchez Flores a una plantilla prácticamente igual que la que tendrá el italiano.

De entre los recién ascendidos, destaca el Middlesbrough que entrena Aitor Karanka . Desde 2013 lleva el de Vitoria en el Boro, y el tiempo le ha permitido edificar un equipo trabajado, duro de roer y competitivo como pocos. La secretaría técnica que dirige Victor Orta ha firmado en el mercado estival a Negredo, Valdés, De Root o el prometedor Fischer .

Están los de Karanka un escalón por encima de Hull City y Burnley , los otros dos conjuntos que hasta hace unos meses militaban en la Championship. El Hull perdió a Bruce por pecar de inactivos en el mercado de fichajes. Iniciará la liga con Mike Phelan como interino, que no solo ha visto como no arribaban caras nuevas, sino que tendrá que competir sin el concurso de Diamé , uno de los pilares en el ascenso. Tampoco se ha reforzado en demasía el Burnley de Sean Dyche , entrenador que ya dirigía al equipo cuando ascendieron a la Premier en 2014, sobrevivió al descenso de 2015, y vuelve a tener una oportunidad para mantener al club en la máxima categoría en la presente campaña. Las llegadas de Flanagan o el internacional con Islandia Gudmundsson completan un plantel que está llamado a sufrir para no descender en la liga de Mourinho, Guardiola o Conte.

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