fc barcelona
Alba y Cesc, dos formas de encajar la crítica en el Barça
Fabregas arropa al Tata: «Es una persona humilde, de las más autocríticas que he conocido en el mundo del fútbol»
La semana prometía ser larga para el Barcelona tras la derrota de Anoeta. Y lo está siendo. Por primera vez desde Navidad, la plantilla dispone de ocho días de descanso antes de un partido; más de una semana para preparar el partido ante el Almería, organizar comidas de hermandad, resetear y aprovechar algún acto público para lanzar mensajes de autocrítica, optimismo y fortaleza. No han faltado las muestras internas de apoyo a Gerardo Martino, sancionado con vistas al domingo por enzarzarse con el banquillo de la Real Sociedad y criticado por escoger mal el día para sacudir al vestuario con rotaciones. Pese a su sorpresa, los jugadores le arropan. «Estamos a muerte con el entrenador», sentenció Cesc Fábregas. «Es una persona humilde, de las más autocríticas que he conocido en el mundo del fútbol».
También Jordi Alba cerró filas ayer con el Tata, aunque con una declaración más impetuosa. «Las críticas vienen de fuera, son gratuitas y quieren hacer daño al Barcelona», reprochó el lateral, visiblemente molesto con un clima de opinión demasiado hostil, según su punto de vista, ante la derrota. Cesc se mostró más resignado: «El fútbol no tiene memoria. Aceptamos las críticas, nos las merecemos, tenemos el culo pelado». El centrocampista invocó a la autoestima. «Estamos a tiempo de abrir los ojos, juntarnos y conseguir cosas importantes». Y aprovechó su comparecencia para dar un tirón de orejas a los que, como Neymar , no restringen su actividad en las redes sociales en los momentos bajos: «Cuando hay derrotas, mejor no tocarlas».
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete