Hazte premium Hazte premium

Crítica de «Los desvaríos del veraneo»

«El espectáculo es un gran juego, divertido, dinámico, cocinado a temperatura de farsa disparatada, cargado de estrépitos y agitaciones»

Cartel de la obra «Los devaríos del veraneo» Venezia Teatro

JUAN IGNACIO GARCÍA GARZÓN

¡Cuánto Chéjov hay en este Goldoni ! La apreciación simultánea desde nuestro hoy de autores de épocas distintas nos permite esta paradoja que pone de relieve las interconexiones entre escritores alejados en el tiempo. Los banales afanes que angustian a los burgueses ociosos dibujados por el comediógrafo italiano, unos tipos que viven por encima de sus posibilidades para guardar las apariencias mientras intentan correr más deprisa que la ruina que les muerde los talones, son similares a los que siglo y medio después utilizó el dramaturgo ruso para diagnosticar la decadencia de quienes miraban hacia otra parte mientras su mundo empezaba a desmoronarse.

«Huye de la solemnidad y subraya los ritmos y estructuras de la Commedia dell’arte»

Carlo Goldoni escribió en 1761 tres piezas sobre las vacaciones estivales: «La ansiedad del veraneo», «Las aventuras del veraneo» y «El retorno del veraneo». El gran Toni Servillo trajo a Madrid a finales de 2009 un hermosísimo espectáculo con toda la trilogía, en alianza de Teatri Uniti y Piccolo Teatro de Milán. Ahora Venezia Teatro, que hace algunas temporadas ofreció un notable montaje de otro título goldoninano, «La Hostería de la Posta», se aproxima a la primera parte, traducida como «Los desvaríos del veraneo » y anuncia su propósito de montar próximamente las otras dos. Todas las piezas tienen entidad propia pero están estrechamente vinculadas entre sí, viniendo a ser el planteamiento, nudo y desenlace de una comedia que desemboca en las ácidas aguas del drama.

La versión y la puesta en escena de José Gómez-Friha despliega de manera vivísima la red de convenciones sociales e intereses cruzados en la que se encuentran atrapados los personajes, sus amoríos y su guarnición de celos, sus vanidades y sus flaquezas, su mundo de chismorreos y apariencias, mientras se preparan afanosamente para partir de Livorno a la localidad campestre de Montenero; no ir supondría un baldón de descrédito social.

En un paisaje de cajas y baúles, los nueve actores que interpretan la función están siempre presentes, flanqueando los que esperan su turno a quienes intervienen en ese momento en escena: desde su posición, acotan, comentan, rompen constantemente la cuarta pared , lanzan bromas metateatrales al público... Dos micrófonos en los extremos del escenario sirven de púlpito para los apartes y monólogos interiores y para interpretar alguna que otra canción, como las deliciosas «These Boots Are Made for Walking» o «It's my Party». Gómez-Friha huye de la solemnidad y los tiempos muertos y subraya con gran finura los ritmos y estructuras de la Commedia dell’arte que se agitan bajo la primorosa arquitectura escénica dispuesta por Goldoni.

Un espejo ideal en el que contemplarse

El espectáculo es un gran juego, divertido, dinámico, cocinado a temperatura de farsa disparatada, en el que, en medio de los estrépitos y las agitaciones, se deslizan sutiles guiños, como el homenaje al número de la maleta inmóvil de Marcel Marceau o el delicado broche de la función con una preciosa escena de amor sin palabras de los criados, interpretados muy entonadamente por Andrés Requejo y Helena Lanza.

Todo el reparto está estupendo : Macarena Sanz, soberbia como la damita enamorada que siempre logra imponer su voluntad, y Esther Isla, su caprichosa y descacharrante rival, mantienen un mano a mano de antología; Kevin de la Rosa borda el desparrame neurótico del gorrón Ferdinando; Juanma Navas, el padre bonachón, y Vicente León, el iracundo componedor, aportan equilibrio y profundidad, y Alejandro Albarracín y Borja Luna encarnan cabalmente a los galanes. Sara Roma firma un bonito vestuario que hibrida los estampados dieciochescos y las notas contemporáneas. Ahora que todo el mundo anda más o menos entregado a sus personales desvaríos del veraneo, este espectáculo ofrece un espejo ideal en el que contemplarse a la distancia apropiada.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación