Hazte premium Hazte premium

Los papeles inéditos de Bolaño

En el décimo aniversario de la muerte del escritor chileno, el CCCB cataloga y expone su archivo. Dejó sin publicar cuatro novelas; no verán la luz por ahora

Los papeles inéditos de Bolaño efe

sergi doria

«Abre un cajón del estante de los libros. Está lleno de papeles manuscritos. Coge uno al azar: A veces soy inmensamente feliz. La letra es pequeña…». Este fragmento inédito de Roberto Bolaño podría ilustrar el trabajo que los comisarios de «Archivo Bolaño» -Juan Insúa y Valerie Miles- han realizado codo a codo con Carolina López, la viuda del escritor. Bolaño, advierte Carolina, «lo guardaba todo».

Hasta finales de 2005 sus novelas, cuentos, notas, escritos de vida y correspondencia permanecieron en cajas, a la espera de clasificación. La exposición es sólo la punta del iceberg de una vida hecha escritura. A los 230 originales, el centenar de fotografías y libros, los audiovisuales y archivo digital de entrevistas, habrá que añadir, señala su viuda, «una ordenación de su poesía, de las fotos familiares, de sus cintas y cedés, el análisis de la correspondencia y la valoración de los textos inéditos».

Sigamos al autor de «Los detectives salvajes». Barcelona, 1977. Calle Tallers, 45 del barrio del Raval: un chileno exiliado melenudo y gafapastas intenta sobrevivir. Alterna poemas, cuentos y diarios de inmigración con su trabajo de vigilante nocturno, cada fin de semana, en el camping «Estrella de Mar» de Castelldefels, fecunda comedia humana. De las roulottes de Bolaño, Javier Cercas extrae al Miralles de «Soldados de Salamina». Entre los proyectos barceloneses, la novela a cuatro manos con su amigo del alma, Antoni García Porta: «Consejos de un discípulo de Morrison a un fanático de Joyce».

Laboratorio gerundense

La viuda del escritor advierte que Bolaño «lo guardaba todo»En 1980, Bolaño se muda a Gerona. Mantiene una expansión creativa que no recibe el eco editorial: presenta sus relatos a concursos, ensaya técnicas narrativas, emula los juegos de estrategia y la ciencia-ficción. Muchos inéditos datan de ese laboratorio gerundense. El escritor lo anota «Entre paréntesis»: «En mi cocina literaria ideal vive un guerrero, al que algunas voces (voces sin cuerpo ni sombra) llaman escritor. Este guerrero está siempre luchando. Sabe que al final, haga lo que haga, será derrotado. Sin embargo, recorre la cocina literaria, que es de cemento, y se enfrenta a su oponente sin dar ni pedir cuartel». En 1981 conoce a Carolina López: «Había dejado de ser vigilante del cámping y trabajaba en lo que podía: incluso de mayordomo, aunque sólo aguantó tres días».

La población costera de Blanes es la última etapa del escritor, que ha de decidir cada día entre tomarse un café o leer el periódico. Bolaño ayuda a su madre, que ha montado una tienda de bisutería y en 1985 se casa con Carolina. Les espera «una pobreza feliz: con mucho trabajo y mucho cariño». Bolaño escribirá más de catorce mil páginas. Con letra clara y apretada, o en una máquina eléctrica que cambiará por el ordenador en 1995.

Su nombre suena discretamente con «La literatura nazi en América», que publica Seix Barral en el 96 y alcanza amplitud en 1998 al ganar con «Los detectives salvajes» (Anagrama) los premios Herralde de Novela y Rómulo Gallegos. Es un escritor seriamente enfermo con una obra condenada a la posteridad. Bolaño contrarreloj: escribe de noche y duerme de día. No todo es grafomanía, matiza Carolina: «Es adicto a los juegos de ordenador, la telebasura y las películas policíacas de tercera B». Su obra culminante, «2666», ve la luz después de su muerte. Entre el «Archivo Bolaño», cuatro novelas inéditas que sus herederos no tienen intención de publicar a corto plazo: «Conviene ser riguroso y valorar esos materiales, antes de editar obra nueva hay que dejar que su obra se traduzca a otros países».

Pasión literaria

El próximo otoño, el «Archivo Bolaño» viajará a Nueva YorkEl nombre del escritor, que es también personaje de una historia de pasión literaria, resuena en toda América. ¿Por qué gusta Bolaño en Estados Unidos? Según Barbara Epler, su primera editora estadounidense en «New Directions», «por su absoluta oposición a cualquier aspecto del aburrido mundo de la escritura creativa, todos los productos de las fábricas universitarias de másters de Estados Unidos. Bolaño está a un universo de distancia de los numerosos y grises libros de dinastías norteamericanas». Susan Sontag describió su «Nocturno de Chile» como «un maravilloso río de sentimiento, una brillante meditación, una fantasía fascinante… una novela contemporánea destinada a tener un lugar permanente en la literatura mundial».

Desde 2005, el millón largo de lectores de «The New Yorker» se adentraron en el universo Bolaño. Farrar, Straus & Giroux se hizo con los derechos de «Los detectives salvajes» y aprovechó la siembra de «New Directions» para «poner en marcha una impresionante maquinaria de publicidad. Jeff Seroy, el extraordinario publicista de Farrar, y el editor Lorin Stein crearon una excepcional y bella página web dedicada a Bolaño. También se encargaron de todos los medios sociales, entonces aún nuevos». El próximo otoño, el «Archivo Bolaño» viajará a Nueva York y en 2014 recalará en la madrileña Casa del Lector.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación