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ARTE

Naufragando a la deriva en el CACMálaga con Travis Somerville

Desde la otra orilla del Atlántico, los problemas son los mismos. Travis Somerville les pone la cara colorada

Detalle de la pieza «War Paint», de Somerville

JUAN FRANCISCO RUEDA

En este momento de sorpresa que nos depara la corta trayectoria presidencial de Donald Trump , con la «exudación» de algunos de los «males» que secularmente se le ha atribuido a Estados Unidos, la obra de Travis Somerville (Atlanta, 1963), un retrato mordaz y descarnado de su país, adquiriere una evidente y urgente pertinencia. Buena parte de las obras expuestas en Málaga parecen respuestas inmediatas a algunas de las situaciones sociopolíticas más acuciantes, como la crisis humanitaria de los refugiados . Sin embargo, en otras, en las que no apunta directamente a los dramáticos episodios de desplazamiento desencadenados en países como Siria, sino a las tensiones migratorias y a las políti- cas destinadas a protegerse de esos flujos, Somerville sitúa a su país en la diana de su ejercicio crítico.

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El artista lo hace oponiendo a ese rechazo la realidad y conformación mestiza y migrante (por aluvión) de EE.UU. , una nación esencialmente plural (en War Paint , una balsa con la bandera americana como vela, aparecen un retrato de Fray Junípero Serra, una enseña española y un rostro de un cherokee que alertan sobre esa mezcolanza); nación que pretende cerrarse «a cal y canto» con argumentos como «dejar fuera a los malos». Esto le sirve para hacer mención expresa, mediante un cartel, a la posverdad y para recuperar episodios aciagos y lacras como la esclavitud y el racismo.

Aferrarse a la Historia

Somerville se aferra a la Historia contextualizándola con la actualidad para desacralizar el mito de EE.UU. como tierra de promisión y oportunidades mediante la escenificación de la desigualdad, de la visibilidad recobrada del Ku Klux Klan y de la vuelta a una supuesta esencia. En rigor, es un lamento que mantiene desde hace años, advirtiendo, tal vez, un sustrato inalterable en la sociedad y política norteamericanas. La monumental pintura Great Expeditions (2009) se convierte en friso de algunas de esas pautas de conducta, no siempre superadas: un personaje del Klan, una horca, la barca Avaricia , un pozo petrolífero y un paisaje contaminado por un vertido que mancha el futuro de los jóvenes. Todo con la omnipresente bandera nacional.

La balsa y otros tipos de embarcaciones toman protagonismo en el conjunto. Estas tienen un sentido ambivalente. Como evidencian algunas obras que incorporan la palabra Refugee , aluden a la crisis migratoria que se ha acrecentado ahora, aunque deviene símbolo de las migraciones, sin más. En ocasiones, las embarcaciones parecen zozobrar, mientras que en otras, citando la mítica La balsa de la Medusa (1819), es imagen literal del naufragio, de la angustia de esa travesía en pos de la salvación y la convivencia con la tragedia . Pero, debido a la retórica y sistema de citas que emplea para integrar distintos elementos visuales descontextualizados al modo de un palimpsesto deudor de David Salle, esas balsas, como también hizo Géricault, pueden configurarse como metáfora del Estado, de algunas de sus erráticas políticas y sus funestas consecuencias.

Somerville es extremadamente cuidadoso en la elección de los materiales, en ocasiones, elementos reales que incorpora o funcionan como soportes. Son seleccionados por su valor semántico, por su capacidad para generar significado y reforzar el sentido. Los tres punzantes retratos de niños refugiados ocupan sacos usados para alimento de animales. Algunas de las más vergonzantes imágenes que ha dejado la crisis de los refugiados nos muestran a estos como ganado , metafóricos rebaños guiados por soldados a caballo como cow-boys. En esas obras aparecen máscaras antigás y galones del ejército ruso, señalando, además de la causa bélica que genera el desplazamiento, el papel que ha jugado Rusia. Somerville no elude señalar culpables, agitar conciencias y hacernos ver que no sólo están a la deriva las balsas de los refugiados.

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