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reportaje

La película de Angry Birds y otras adaptaciones peligrosas

En 2016 saltarán a la gran pantalla los ídolos del videojuego, prueba de que el cine vale igual para un roto que un descosido

La película de Angry Birds y otras adaptaciones peligrosas abc

j. c.

Se veía venir y, finalmente, se ha hecho realidad: los Angry Birds tendrán película, producida por John Cohen («Iron Man», «Mi villano favorito» y «Ice Age») y en forma de animación 3-D (lástima, hubiese sido de lo más entretenido especular sobre un posible casting humano). ¿Serán capaces de convertir en un señor largometraje un jueguecito irresistible pero con menos «chicha» que el mecanismo de un chupete ? (igual alguno piensa que las aventuras de los pajatiros cabreados es puro Bergman). Como aún hay tiempo hasta su estreno, previsto para 2016 , no vendría mal que sus responsables se fijen en otros casos más o menos aberrantes de adaptaciones «peliagudas» o contra natura a la gran pantalla . Por ejemplo, estos, divididos por sectores y subgéneros.

VIDEOJUEGOS. El filón que toca de lleno a «Angry Birds» y que ha provocado bodrios de la categoría de «Super Mario Bros.» (sus protagonistas Bob Hoskins y John Legizamo aún deben tener pesadillas con ella) o, sin ir más lejos, cualquier adaptación perpetrada por el temible Uwe Boll . Por cierto, también hubo un proyecto de película de «Pac-Man» , que algún ejecutivo sensato (en Hollywood quedan dos o tres) frenó en seco.

JUEGOS DE MESA. El fracaso de «Battleship» , filme basado en el simpático «Hundir la flota» , ha debido poner sobre aviso a los estudios que una cosa son los tableros y las fichas y otra las pantallas y palomitas. Aunque hay que admitir que la versión cinematográfica de «Cluedo» (1985) tenía su gracia. ¿Y cuántas películas no tienen su inspiración en el «Monopoly», en el ajedrez o hasta en el juego de la oca o el mus?

CROMOS. Tras «Eduardo Manostijeras» y «Ed Wood», Tim Burton tenía carta blanca para hacer lo que le viniese en gana. Y el muy garboso eligió hacer una película basada en una colección de cromos de su infancia, «Mars Attacks!» (1996) . El resultado tenía su gracia y él, sin duda, se lo pasó pipa. Capricho concedido. Muy distinto fue el caso de la inmunda adaptación de «La pandilla basura» (1987) , un engendro escatológico e ilógico que figura con toda justicia en las listas de las peores películas habidas y por haber . Aunque, como dice un comentario en YouTube, «todavía es mejor que "Crepúsculo"».

JUGUETES. Nada que objetar, al menos como macro-operación comercial a las películas que le aplicaron un bote de aceite de hígado de bacalao a mupecos como «Transformers» o «G.I. Joe» . Incluso el filme alrededor del articulado mundillo Lego promete. Claro que el no va más en este campo fue «Mr. Magorium y su tienda mágica» (2007), película inspirada y apadrinada por esa tienda de juguetes con una puerta grande y otra pequeñita, ya saben.

TELESERIES. Mucha tela que cortar en este caso. Tanta, que ya nos hicimos eco en su día . Poco más que añadir. Solo recordar un nombre, una amenaza: la película de «Mag Gyver ». Ahí lo dejamos.

CÓMICS. Otro campo minado, capaz de lo mejor («Los Vengadores», «El Caballero Oscuro») como de lo peor: «The Spirit», «Dragon Ball: Evolution», «Abraham Lincoln: cazador de vampiros» y, ojo que esta es de las que duelen, «Howard, un nuevo héroe» . De «Astérix y Obélix» hablamos en otra ocasión...

MUSICALES. Sí, cierto que este año «Los miserables» se lo están llevando crudo, pero conviene mentar fracasos tan brutales como «Los productores» o, este mismo año, «Rock of ages» , para constatar que el cine suele desafinar más de la cuenta en estos casos.

SIN CLASIFICAR. Por mucho que lo hemos intentado, no hemos sido capaces de catalogar adaptaciones tan siniestras como la anunciada sobre el «Libro Guinness de los récords» o algo llamado «The Oogieloves in the Big Balloon Adventure» , un ente pergeñado por uno de los creadores de «Los Teletubbies» y que bebe sus fuentes de algunos juegos interactivos infantiles (o algo así). Cómo será la cosa que se ha convertido en el mayor fracaso de 2012 , con 20 millones de dólares de presupuesto y solo uno en taquilla. Contemplen y pásmense:

Para acabar con una nota optimista, no olvidemos el caso de una película basada en un concurso de televisión («¿Quién quiere ser millonario?») y que se convirtió en uno de los mayores éxitos de los últimos tiempos: «Slumdog millionaire» . Aún hay luz al final del túnel en la acera de las adaptaciones bizarras.

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