El compromiso de Antoni Miralda obtiene el premio Fundación Arte y Mecenazgo

El nombre de los galardonados ha sido dado a conocer hoy por la directora general adjunta de la Fundación Bancaria La Caixa, Elisa Durán, y la directora general de la Fundación Arte y Mecenazgo, Mercedes Basso, en un almuerzo al que también han asistido los premiados.

Los galardones, impulsados por la Fundación Bancaria La Caixa, pretenden, según Durán, «poner en valor la cadena del arte», la que forman artistas, galeristas y coleccionistas, y acortar «la brecha» entre creación y el público. Además, los tres premiados, ha precisado Basso, comparten el gusto por correr riesgos, «el camino a la distinción».

En el caso de Miralda, que recibirá 50.000 euros, de los que 20.000 se destinarán a la producción de un «libro de artista», el jurado, formado en este caso por Francisco Calvo Serraller, María de Corral y Bartomeu Marí , ha apreciado su «coherencia», «independencia», «generosidad» y ambición participativa de su obra.

El creador «más versátil, genial y divertido», según Basso, ha señalado que «de pequeño» le fascinaba el maná y que este premio ha sido «un poco como ese milagro; ahora está en el plato». Con ese maná podrá hacer, por fin, el libro de artista que lleva preparando cinco años, con su «memoria oral» e imágenes del restaurante que creó en Tribeca, Nueva York, El Internacional, y que funcionó de 1984 a 1985, «hace ahora 30 años».

«La idea es divulgar por qué hicimos aquel proyecto 'arqueológico', que empezó como de los cincuenta y terminó siendo de los años veinte. Los clientes comían pero también degustaban otras experiencias», ha detallado el barcelonés, que ha vivido y trabajado en París, Londres y Nueva York y ahora se ha instalado en Miami, porque quiere estar «más cerca del Caribe, de Latinoamérica».

Miralda (Terrassa, 1942) es autor de una obra «arriesgada y consolidada» fruto de un lenguaje que encuentra en la comida una referencia de cohesión comunitaria y un elemento creativo a partir del color y de su simbolismo. Ha organizado «la boda» de la Estatua de la Libertad con el Monumento a Colón de Barcelona con el proyecto «Honeymoon» (1986-1992), ha desarrollado el Food Culture Museum, un museo sin paredes, ha creado el Food Pavilion para la Expo 2000 de Hannover y los proyectos Power Food y Sabores y lenguas y en 2010 presentó en el Reina Sofía «De gustibus non disputandum».

La galería CarrerasMugica, dirigida por Pedro Carreras e Ignacio Múgica, se ha constituido en un referente en el ámbito de las que hay en el País Vasco y entre las internacionales, según Basso. El premio a la galería, otorgado por un jurado formado por Juan Ignacio Vidarte, Mario Rotllant y Rosina Gómez-Baeza, conlleva una dotación de 40.000 euros, que emplearán en dar espacio a desconocidos, a artistas emergentes, y lo harán en los tres espacios expositivos que acaban de inaugurar.

«Queremos hacer cosas, y contribuir a superar esta situación de tristeza, de dejadez, un manto que parece que cubre todo, aunque el arte siempre sale a flote», ha señalado Múgica. Son los galeristas de creadores «nuevos» como Txomin Badiola, Pello Irazu, Itziar Okariz y Xabier Salaberria, del mítico Eduardo Chillida, o Rita McBride, Jessica Stockholder y Richard Serra.

La Fundación Arte y Mecenazgo ha reconocido, sin dotación económica, a la Fundació Sorigué por su «capacidad de compartir» desde su creación, en 1985, y su contribución al conjunto de la sociedad. En su caso, el jurado, compuesto por Carlos Fitz-James Stuart, Felipa Jove y Juan Uriach, ha fallado a favor de Julio y Josefina Sorigué por su «extraordinario compromiso» y actividad coleccionista.

«No nos lo esperábamos y ha sido una magnífica sorpresa», han señalado Julio Sorigué y su sobrina Ana Vallés, que ha adelantado que sus próximas acciones como coleccionistas de arte contemporáneo, un campo en el que se iniciaron hace diez años, serán con obras de Bill Viola y Wim Wenders.

Los premios, que se entregarán el próximo mayo, han recaído en las cuatro ediciones anteriores en Soledad Sevilla, Eva Lootz, Elena Asins e Isidoro Valcárcel Medina; las galerías de Juana de Aizpuru, Soledad Lorenzo, Elvira González y Silvia Dauder, y los coleccionistas José Luis Várez Fisa, Helga de Alvear, la Colección Fundación Juan March y Pilar Citoler.