Miguel Henrique Otero: «ABC ha asumido la causa democrática venezolana, como una significativa batalla»

Es un gran honor compartir este momento tan especial con cada uno de ustedes para recibir un premio tan importante y significativo para el periodismo, la libertad de expresión y la democracia. Especial importancia tiene para mi que se me otorgue en una fecha tan especial como la de hoy cuando se conmemora el día de los derechos humanos. Como venezolano me ha tocado sufrir y ver padecer a muchos de mis compatriotas por la violación sistemática de sus derechos por parte del régimen venezolano.

He venido a compartir mi pensamiento más insistente que estoy seguro que comparten los millones de venezolanos que el pasado domingo se pronunciaron de forma inequívoca y contundente contra el régimen neo-totalitario que se hizo del poder en mi país a finales de 1998.

Quiero decirles a cada uno de ustedes: ninguna lucha ocurre en vano. Y menos aún, si esa lucha es por la Democracia que es, a fin de cuentas la que mayor sacrificio y tenacidad demanda y la que más adhesiones y diálogo nos reclama.

A pesar de las infinitas dificultades que le tocó enfrentar a los venezolanos por el grosero ventajismo del gobierno en el proceso electoral, el hostigamiento y la coacción sistemática que se ejerció en contra de los funcionarios públicos para obligarles a votar por el régimen, nada de ello logró doblegar a los ciudadanos. La sumatoria de estas fuerzas, no solo políticas sino también espirituales, galvanizaron un enorme triunfo electoral, que inaugura una nueva etapa histórica. Es el fruto de no haber desmayado.

Los demócratas venezolanos, por fortuna, no hemos estado solos. Nuestras denuncias de violación de los derechos humanos de los ciudadanos y sus familias; el insistente reclamo que hemos hecho para que se libere a los presos políticos, que algunos inescrupulosos beneficiarios del régimen aquí en España, han pretendido negar; la persecución múltiple, legal, económica y física, que viene ocurriendo desde hace quince años en contra de medios de comunicación, periodistas y editores; todas nuestras palabras de resistencia y combate han encontrado audiencia y eco. En los últimos años, instituciones, medios de comunicación y voces destacadas en la opinión pública, nos han acompañado de muchas maneras.

En el caso de España, debo decir que los demócratas venezolanos tenemos una deuda moral con el diario ABC, por el espacio y el tratamiento, ambos privilegiados, que a lo largo del tiempo le han otorgado a los asuntos de nuestro país. Si la solidaridad es una elección, la solidaridad activa es la más alta expresión de ello. Más que una simple fuente informativa, Venezuela ha sido y es para ABC, un hito para pensar el destino de América Latina, para verificar dramáticamente los riesgos que entraña el populismo, para revelar, cuando corresponde, la profunda asociación entre demagogia y corrupción, que ha sido uno de los signos comunes entre los regímenes neo-totalitarios y populistas que seguimos padeciendo del otro lado del Atlántico.

A lo largo de la lucha que hemos dado para garantizar las condiciones básicas de ejercer libremente la profesión de informar; durante la tarea titánica que ha significado mantener unos pocos medios operando, entre ellos El Nacional, y contrarrestar la hegemonía comunicacional del gobierno; en el tiempo de exilio al que hemos sido condenados decenas y decenas de profesionales de la comunicación, ABC se ha constituido en una referencia, diré más, en una estructura de comunicación que ha asumido la causa democrática venezolana, como una significativa batalla, entre las muchas que acomete día a día.

Soy portavoz de palabras y profundos sentimientos de gratitud hacia ustedes. Es mucho lo que la Venezuela que está comenzando a emerger, tiene que decirles. Como ustedes bien saben, la lucha no ha terminado, nos encontramos en medio del fragor de una de sus más intensos episodios. Saber que ABC seguirá siendo una de las más potentes voces editoriales de Europa, y que continuarán informando y opinando sobre los hechos de Venezuela, es para nosotros un aliento, una corriente de energía que nos estimula a seguir adelante.

Agradecer es tener nobleza y equidad, aprecio y agradezco a los ex presidentes José María Aznar y Andrés Pastrana que me postularon para este meritorio premio, hombres de luchas y sueños, Gracias presidente Aznar por su fortaleza y compañía en nuestra causa. Andrés, amigo, gracias por tu confianza y tu coraje. Los venezolanos demócratas valoramos tu valentía y tus frecuentes visitas al país. Tu voz denunciado que en Venezuela gobierna una dictadura se ha escuchado en el mundo entero. Mi esposa Antonieta me pide que aproveche este momento especial y te diga que todos los venezolanos te grabamos en nuestro corazón.

Antonieta gracias por compartir mi vida y sueños, a mis Hijas e Hijos Maria Belen, Ana Isabel, Jorge, Alejandra, Simon y Maria Teresa por brindarme su apoyo y comprensión. A mi hermana Mariana y a mi cuñado Argenis, quienes en carne propia sufren demandas y acusaciones legales por esta unidos en los ideales de libertad.

A todos los periodistas de El Nacional que con mucha valentía y sin temor han tenido que ejercer su oficio en un ambiente hostil y sin tener acceso a las fuentes oficiales; al personal administrativo, a los trabajadores y obreros que conforman la gran familia de El Nacional, le digo gracias. Este premio también es de ustedes.

A Charito Cruces y Patricia Campos que son incansables e indispensables en mi lucha. A Enrique Alvarado, organizador de las intensas giras por tantos países.

Hoy, Día Internacional de los Derechos Humanos, dedico este premio a todos lo que les han violado sus derechos humanos. A los valientes estudiantes que por luchar por la libertad y la democracia perdieron la vida en manos de este régimen. Por los estudiantes que están presos, con la marca de las torturas en su cuerpo y en su alma. A los presos políticos: mi amigo el Alcalde Antonio Ledezma, ese gran hombre de gran inteligencia y fortaleza electo con 700 mil votos y al que hoy en día el régimen le ha cercenado su libertad de la manera mas violatoria. A Leopoldo Lopez, Daniel Ceballos, Manuel Rosales. Todos ellos privados de su libertad solo por pensar diferente.

Vienen tiempos de ciudadanía. De pensar qué futuro queremos, cuáles son las vías factibles, y de qué manera los amigos de Venezuela pueden continuar ayudándonos a crear las bases de un país más libre y justo. Las próximas semanas y meses serán decisivas en el futuro de nuestro país. Recibo este reconocimiento, no como el hito final de un recorrido, sino como el comienzo de una etapa de lucha a favor de las libertades de mi país. Es un estímulo y un honor que agradezco desde lo profundo de mi corazón. Espero merecerlo y poder, en muy corto tiempo, compartir las mejores noticias sobre el retorno de la democracia en Venezuela.

Que Viva la democracia y la libertad de expresión.

A Su Majestad El Rey, al Director de el Diario ABC. A todos mis infinitas gracias.

En la nueva Venezuela los esperamos.