Herrera invita a la sociedad a unirse al Pacto por la Infancia

«Los niños son nuestro más valioso patrimonio. Son el futuro, pero también presente, y como tal, también están afectados por las duras consecuencias de la crisis», señaló el dirigente regional, quien explicó que el acuerdo tiene el objetivo de convertirse en un instrumento eficaz para «visibilizar, promover e impulsar los derechos de los más de 370.000 menores que viven en Castilla y León, en especial de los más vulnerables».

El pacto comenzó a fraguarse el pasado 9 de marzo, cuando la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Milagros Marcos, presentó sus líneas estratégicas a los miembros del Consejo Regional de la Infancia. Ayer la máxima responsable en políticas sociales de la Comunidad señaló que la presentación en sociedad de este documento es sólo «el inicio de un camino en el que seguiremos trabajando». Para ello, su departamento impulsará la elaboración de protocolos específicos que definan aún más las actuaciones que incluye este acuerdo, un trabajo que hará de la mano de medios de comunicación, instituciones y diversas entidades y asociaciones, entre ellas, Unicef, quien ha ayudado en la redacción del documento y a quien Herrera solicitó ayer que siga trabajando para sumar al Pacto «el mayor número de adhesiones».

Cuatro grandes compromisos guían el documento que puede consultarse en la web de la Junta: impulsar la elaboración y desarrollo de políticas de infancia; fomentar acciones a favor de los niños de Castilla y León; promover tanto a nivel municipal como regional las medidas necesarias para hacer visible a la infancia en la agenda política y acordar los principios a tener en cuenta en el análisis, diseño y ejecución de los programas de acción social orientados a la infancia. Así, entre los puntos específicos, el pacto, basado en el contenido de la Convención sobre los Derechos del Niño aprobada por la Asamblea de la ONU en 1989, invita a las entidades locales a impulsar planes que atiendan las necesidades específicas de sus niños, garantizar que los pequeños reciban servicios básicos como salud, educación y protección sin discriminación y hacer frente a los riesgos que para los niños pueden suponer el uso de las nuevas tecnologías.

«Castilla y León es una comunidad comprometida con los derechos de la infancia», destacó el presidente de la Junta, recordando el artículo 13.6 del Estatuto de Autonomía y la Ley autonómica de Promoción y Protección a la Infancia, que este año cumple su décimo aniversario. Así, se refirió al pacto presentado como una «renovación» de los principios y las líneas de trabajo que «abrió» aquella normativa, que calificó de «innovadora, integral y avanzada». En este sentido recordó, entre los números que avalan las políticas autonómicas en materia de protección de la infancia, que entre 2002 y 2012 la Junta ha protegido a 5.841 menores cuando sus familias no se podían hacer cargo de sus hijos; ha atendido a 16.000 jóvenes infractores y ha tramitado ha tramitado 3.431 expedientes que dieron lugar a 2.794 menores adoptados.