Un disco para iluminar la Habana

Este nombramiento «ha sido como cuando toca El Gordo y está muy repartido; hay mucha gente que ha participado en este disco desinteresadamente. Además, al tener ese componente social, hace que muchas personas que se sienten partícipes», afirma Hernán. Él se refiere también a la asociación Fisensi, de Miguelturra, cuya labor se destina a mejorar la calidad de vida de las personas afectadas de Síndrome de Down.

La nominación supone para los músicos de Ciudad Real un reconocimiento a la calidad de cada una de las canciones, que son nanas salpicadas de un encanto literario que siempre construye el poeta cubano Aldo Méndez. «Solo la gente cercana sabe la historia del disco, con lo que está probado que el jurado ha premiado la calidad pura y dura, no lo que conlleva. Y esto refrenda una columna importante del proyecto, que lo hace sostenible», reflexiona Carlos.

Imbuidos en la ilusión de ese reconocimiento internacional, son conscientes de que «es muy difícil dar el campanazo», dice Milla. «No por la calidad ni por que no creamos en el proyecto -subraya-, sino porque nos medimos con Paco de Lucía, Amaral o David de María, entre otros». Grandes nombres y carreras consolidadas que no ensombrece una propuesta musical que está recorriendo ahora medio mundo, en los viajes de cada uno de los músicos participantes en la producción del disco, y en cualquier ocasión. «Lo ha escuchado Paquito de Rivera, uno de los saxofonistas de Jazz Latino más importantes y la crítica ha sido buena», dice Milla.

La inercia de esta clasificación les lleva ahora a los Grammy Latinos, donde ya se han inscrito, y donde esperan tener más clasificaciones al haber más apartados donde puedan encajar al haber más categorías; no solo en la internacional.

De los 3000 discos que autoeditaron, calculan que ya se han vendido la mitad en unos pocos meses. El resultado pudieron comprobarlo ayer en los locales de la Asociación Fisensi, en Miguelturra. Gracias a su pasión musical las personas con Síndrome de Down de la asociación están disfrutando de un programa que les ayudará a mejorar su psicomotricidad. Este ha sido el primer premio recibido para estas personas con talento que hoy aguardan a saber si además, conseguirán ese reconocimiento internacional tan merecido.

Sea el resultado que sea, están dispuestos «a no parar», y a seguir iluminando con su música un nuevo proyecto, llamado «La Veleta Roja». Bajo ese sello volverán a emprender proyectos que aúnen música y solidaridad con la misma calidad y entrega que empeñaron en «Donde Nace la Luz».