La «musaraña del terror» vivió en Cataluña hace 9,6 millones de años

El investigador del ICP Marc Furió ha analizado restos hallados en la cuenca del Vallès-Penedès del género Dinosorex, un insectívoro conocido entre los investigadores como la " musaraña del terror ".

El estudio, publicado en la revista 'Comptes Rendus Palevol', revela que este animal vivió en esta zona de la Península Ibérica durante más de 3 millones de años sin presentar cambios morfológicos y que su extinción está relacionada con un cambio climático hace 9,6 millones de años.

Según ha informado hoy el ICP, la "musaraña del terror" se llama así por una traducción poco rigurosa de su nombre científico: Dinosorex, donde "deinos" significa " terriblemente grande " y "sorex" significa "musaraña".

Sin embargo, la apariencia letal de los incisivos, bastante más desarrollados que en otras especies de musaraña, y su gran tamaño corporal, acabó consolidando esta denominación aunque no haya ninguna evidencia científica de que fuese una musaraña especialmente temible o agresiva.

Dinosorex es un género extinto, descrito en 1972 y que se originó en Anatolia (zona oriental de la actual Turquía) a principios del Mioceno, hace unos 23 millones de años. Furió, conjuntamente con investigadores de Francia y Holanda, ha analizado los restos de 'Dinosorex grycivensis' encontrados en varios yacimientos del Mioceno de la cuenca del Vallès-Penedès.

Según el ICP, el hallazgo es el primero de esta especie en el suroeste de Europa, ya que hasta hoy esta especie sólo se había citado en yacimientos de Ucrania, Polonia y Moldavia.

A pesar de que el registro fósil de insectívoros (el grupo que incluye las musarañas, los topos y los erizos) es escaso en la Península Ibérica, la cuenca del Vallès-Penedès representa una excepción y, en el caso concreto de Dinosorex, los paleontólogos han recuperado casi medio millar de piezas de este género repartidas entre más de 40 yacimientos de esta zona.

Dientes de esta especie han sido hallados en el yacimiento de Can Llobateres (Sabadell), el Vertedero de Can Mata (Hostalets de Pierola), o el yacimiento de Castell de Barberà, entre otros.

El análisis de estos dientes ha revelado que 'Dinosorex grycivensis' vivió en varias zonas del Vallès-Penedès durante unos 3 millones de años y que, de forma sorprendente, según los paleontólogos, no experimentó cambios morfológicos significativos ni en su tamaño ni en su morfología a lo largo de este tiempo.

Según el ICP, esta circunstancia es excepcional entre los micromamíferos, ya que éstos suelen presentar tasas de mutación elevadas y, en el registro fósil, se observa como unas especies sustituyen a otras en períodos relativamente cortos, lo que los convierte en elementos muy útiles a la hora de datar yacimientos.

Los paleontólogos han asegurado que si bien esta especie se mantuvo sin cambios durante un período largo de tiempo, su final podría haber sido bastante abrupto.

Los últimos registros de Dinosorex en la cuenca del Vallès-Penedès son de hace 9,6 millones de años, que coincide con un cambio importante en la fauna conocido como la "Crisis del Vallesiense".

Esta crisis representó la extinción de varias especies de mamíferos que habían sido características de los ambientes de bosque subtropical del Mioceno.