El sector catalanista no dará la batalla por la secretaria general del PSC. La constatación de que su postura "no es mayoritaria" dentro del partido ha llevado hoy al líder de la corriente crítica Avancem, Joan Ignasi Elena, a anunciar su renuncia a competir con Miquel Iceta por el liderazgo del partido.

De igual modo, Elena ha anunciado su salida del partido con la pretensión de armar desde fuera un "espacio socialista" que conduzca a una "reunificación" de las distintas corrientes de la izquierda catalanista y soberanista. Por lo pronto, y a expensas de que Avancem corrobore en asamblea la decisión, Elena saldrá del grupo parlamentario del PSC en el Parlament, aunque sin aclarar si se integrarará en el grupo de diputados no adscritos o si renunciará al acta. Con su decisión, se consuma la escisión de parte del sector catalanista.

"No puedes ser crítico toda la vida, a riesgo de convertirte en una caricatura", ha reconocido Elena, que ha señalado que la acción persistente de los discrepantes no beneficia al partido.

Elena ha señalado que cuando la alcaldesa de Santa Coloma de Gramanet, Núria Parlon, parecía que asumía el liderazgo del partido, "la música que sonaba" era positiva, un cambio de rumbo que se intuía en el PSC finalmente frustrado tras truncarse esta opción y cuajar la candidatura de Miquel Iceta.

La renuncia de Elena no despeja por completo el desbarajuste interno del partido. En el Parlamento catalán siguen dos parlamentarias discrepantes, Núria Ventura y Marina Geli, que ya han anunciado que seguirán en el grupo del PSC en la Cámara actalana. Por otra parte, el sector catalanista dentro del partido no se limita a Avancem; falta por ver si los militantes y cargos discrepantes con la línea oficial del partido permanecerán dentro y sometidos a la disciplina de Iceta, o se marcharán, como lo hace Avancem, haciendo aún más grande la escisión anunciada hoy.