La policía teme una «kale borroka» tras la suspensión de la consulta independentista
Artur Mas no controla el millón de personas «fichadas» por la Asamblea Nacional de Cataluña (ANC)
maría jesús cañizares
Lo advirtió hace unos días el propio presidente de la Generalitat, Artur Mas, durante un almuerzo con empresarios: la prohibición de la consulta sobre la independencia de Cataluña puede conducir «a una situación preocupante, dado el grado de movilización del país». Lejos de ser una ... réplica mediática al desmarque del mundo empresarial a su proyecto secesionista, la realidad es que la previsible desconvocatoria del referéndum señalado para el próximo 9 de noviembre dará lugar a acciones reivindicativas en la calle que fuentes próximas a los cuerpos de seguridad del Estado consultadas por ABC ven con preocupación. El entramado independentista, históricamente atomizado y controlado ahora por ERC, han dado ya dos demostraciones de fuerza en la Diada de Cataluña en forma de manifestación (2012) y cadena humana (2013). Éstas han finalizado con acciones radicales muy puntuales —quema de banderas española y foto del Rey— , pero que según estas fuentes, están organizadas y preparadas para actuar.
Año clave
Mas, añaden, no ejerce ningún ascendente en esa galaxia de grupos que se mueven alrededor de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), entidad presidida por Carme Forcadell , y que ha organizado esas dos masivas movilizaciones. Gracias a ello, la ANCse ha hecho con un fichero de casi un millón de personas dispuestas a ocupar las calles cuando este llamamiento se produzca a través de las redes sociales. Y aunque esa acción reivindicativa tenga vocación pacífica «a Artur Mas se le puede ir de las manos», advierten los expertos policiales.
Como se sabe, 2014 es un año clave en el proceso soberanista catalán y de ahí que los responsables de la seguridad del Estado permanezcan alerta ante la posibilidad de incidentes. De hecho, el año pasado la delegada del Gobierno en Cataluña, Llanos de Luna , trasladó su residencia a un lugar más seguro por recomendación de la Policía Nacional en previsión de que este año se puedan producir ataques contra instituciones del Estado en Cataluña.
Ataques a sedes del PPC
Tampoco es una anécdota para estos agentes que, coincidiendo con el proceso independentista impulsado por Mas, se hayan disparado los ataques a sedes del PP en Cataluña, en forma de pedradas, pintadas, amenazas de muerte o incluso acoso personal a concejales de esta formación. En solo una semana, un total de cinco oficinas fueron objeto de vandalismo. La impunidad es la respuesta a la mayoría de estas acciones, según denuncian los populares.
Asimismo, en la mente de los agentes permanece la imagen de vehículos policiales ardiendo ante la Jefatura Superior de Policía de Barcelona, la noche de la huelga general de noviembre de 2012. Según afirman, es un buen ejemplo de que existe movimientos con logística suficiente para llevar actuaciones de «kale borroka» si es necesario.
Tal como informó este diario, dirigentes de la ANC han mantenido contactos con organizaciones de la órbita proetarra o han pertenecido a Terra Lliure . Algunos de ellos han formado parte de la extinta organización terrorista Terra Lliure o del Movimiento de Defensa de la Tierra (MDT), Maulets, o Alternativa Estel. Algunos de ellos se han reciclado en la Candidatura de Unidad Popular (CUP), que en 2012 entró en el Parlamento catalán y que tienen un origen eminentemente municipalista, lo que otorga a esta formación un importante experiencia en movilizaciones callejeras. Recordar que las competencias en materia de seguridad ciudadana en Cataluña están en manos de los Mossos d’Esquadra. A las fuentes policiales citadas no les cabe duda de que, en el supuesto de que se produzcan altercados tras la suspensión de la consulta soberanista, la policía autonómica actuará con profesionalidad, pero recelan de las consignas políticas que se les pueda dar a los agentes, así como de la reciente presentación de Mossos per la Independència, una sectorial de la ANC .
Asimismo, un informe elaborado por ERC, que finalmente quedó en suspenso, proponía la creación de una fuerza policial suficientemente dotada que garantice la seguridad ante una eventual declaración unilateral de independencia. «Es necesario contar con una unidad especializada en grupos radicales, especialmente grupos españolistas, para evaluar la potencialidad de posibles acciones que rompan el orden público», se indicaba en el documento. En otro informe preparatorio de los republicanos, se sugería la creación de un «ejército especializado» (citaban el caso de Chequia) o como alternativa, un acuerdo de defensa con Francia.
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