Neus Munté y la lista de Mas

No estoy del todo de acuerdo con Enric Milló cuando dijo eso de que la presentación del informe llamado «Crónica de una ofensiva premeditada» es la demostración de la incapacidad de un Gobierno. Se refería al Gobierno de Artur Mas y a los agravios de España contra el autogobierno de Cataluña. Un informe de ¡Cien páginas!. A mi modo de ver, el hecho de que alguien de ese Gobierno de Artur Mas (¿habrá sido Francesc Homs?) sea capaz de escribir cien páginas significa una cierta demostración de capacidad, aunque sé que en nuestra actividad política y cultural lo realmente meritorio no es tanto escribir como leer. No conozco apenas a la nueva portavoz del Goberno de Mas, Neus Munté, e ignoro por lo tanto sus lecturas y escrituras, aunque me dé un ligero alcance de ellas, de su idea del universo, del mundo y de Cataluña su llamamiento a no «estigmatizar» a las mezquitas salafistas que tan perfectamente diseminadas están funcionando en la Comunidad. Por qué fiarnos de las informaciones de Túnez (que ha pasado a la ofensiva contra ellas) o de las del Foreing Office británico (que coloca a España, y especialmente a Cataluña, entre las zonas de máximo riesgo), si tenemos un Gobierno catalán y una portavoz que sabe conjugar el verbo «estigmatizar» y que igual se ha leído «Las mil y una noches» en la versión ilustrada, y tal vez ha visto la película de Pasolini. Lo que diga Neus sobre agravios y estigmatizaciones hay que darlo por bueno…

Igual es algo así como una metáfora de la célebre «lista de Mas». Aunque, a estas alturas, lo de las «listas» y los «listos» para el 27 de septiembre es algo más que una metáfora, es una merienda de independentistas, y aún falta el apellido que se le ponga a Podemos, «Podemos guión algo», según el pedazo de cerebro llamado Errejón, y que pretende una identidad nueva, o sea, ni española, ni catalana…

Pobres catalanes, que aún en el dilema de tener una o dos identidades, todavía les lloverá una tercera, y que ya se empieza a vislumbrar en el panorama municipal con ese estilo «no te cortes», ni a la hora de darle curro a la parienta o al pariente, ni a la hora aguas menores con la refrescante foto de Águeda Bañón y ahí va el Ebro. ¿Podemos mejorar?, pues tal vez sí. ¿Podemos empeorar?, pues depende del esfínter de doña Águeda.