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Zimbabue se ha apropiado de diamantes valorados en dos mil millones de dólares

Según denuncia la organización «Partnership Africa Canada», las piedras proceden del yacimiento de Marange y lo considera el mayor saqueo desde los tiempos de Cecil Rhodes

Zimbabue se ha apropiado de diamantes valorados en dos mil millones de dólares ABC

eduardo s. molano

Concepto caduco, aunque con los mismos crímenes. Desde 2008, el Gobierno de Zimbabue se ha apropiado de forma ilegal de diamantes valorados en 2.000 millones de dólares procedentes del yacimiento de Marange , según denuncia la organización Partnership Africa Canada , quien considera este saqueo el mayor que ha visto el mundo «desde los tiempos de Cecil Rhodes» (1853-1902). Como asegura a ABC Alan Martin , director de investigaciones del organismo canadiense, «el contrabando se realiza fundamentalmente a tres niveles: a pequeña escala artesanal (tal y como ha existido durante años), a un nivel intermedio que implica la colusión de militares, políticos y contrabandistas independientes; y a un tercer nivel que implica una manipulación muy sofisticada de precios de las gemas a comercializar».

En 2003, bajo el amparo de Naciones Unidas y la industria del sector, se puso en marcha el Kimberley Process Certification Scheme (KPCS) , un sistema diseñado para dotar a los consumidores de plenas garantías de que los diamantes que adquieren no financian conflictos armados en el continente africano. Pese a ello, las miserias encubiertas del grupo regulador en torno a estas piedras, que representan tan sólo el 4 por ciento del total del mercado (0,1 por ciento, según la industria), continúan.

Se trata, en primer lugar, de un sistema 100 por ciento subjetivo. A finales del pasado año, el Kimberley Process (quien apenas basa su control en un par de visitas guiadas al año) legalizó el comercio de diamantes procedentes de Zimbabue . Y ello, a pesar de las continuas denuncian sobre el trabajo forzoso de niños y las matanzas cometidas en las minas del país . «La definición de lo que constituye un diamante de sangre no está actualizada. Hoy en día, ésta solo se centra en los abusos perpetrados por los movimientos rebeldes. Sin embargo, la mayoría de los excesos que se producen en las zonas de diamantes son cometidos por agentes estatales o empresas privadas de seguridad», asegura Martin.

El caso es especialmente representativo en países como Angola. Durante la guerra civil que asoló el país africano entre 1975 y 2002, el grupo rebelde Unidad Nacional para la Independencia Total de Angola logró controlar la venta de entre el 60 y el 70 por ciento de las gemas que se exportaban desde la región (entre los años 1992 y 1998, la guerrilla acumuló, gracias al negocio de los diamantes, ingresos por 3.700 millones de dólares para sus actividades políticas y militares).

Y acabada la guerra, su monopolio pasó entonces al gubernamental partido Movimiento Popular de Liberación de Angola , lo que ha desembocado en un milagro empresarial, que apenas ha tenido repercusión en la economía civil: Desde 2002, los ingresos por su comercialización se han triplicado, pasando de los escasos 45 millones de dólares de finales de la guerra a cerca de 165 millones en 2007. «La industria tiene que hacer más por defender la confianza del consumidor en estos productos. En caso contrario, podría quedar minada una fuente de ingresos y de empleo muy necesaria para las economías africanas», asegura el experto.

Aunque primero, tocará modificar el lenguaje.

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