Cae la venta de coches japoneses en China por la disputa de las islas Senkaku

Tan drásticas reducciones han encendido las señales de alarma entre los fabricantes nipones, que a finales de agosto controlaban el 21,2 por ciento del mercado automovilístico chino, el mayor del mundo gracias a los 14,4 millones de coches comercializados el año pasado. En 2011, las marcas japonesas sumaban el 21,6 por ciento de las ventas.

Frente a dicho retroceso, los fabricantes alemanes han subido del 21,3 al 23,3 por ciento, mientras que los surcoreanos han pasado del 9 al 9,3 por ciento. A título individual, su crecimiento ha sido mucho mayor al aprovecharse del rechazo del público chino a los coches nipones. Así, las ventas de BMW crecieron en septiembre un 55 por ciento , las de Audi un 20 por ciento y las de Hyundai un 15 por ciento.

La compañía japonesa que más está sufriendo la crisis es Nissan. En 2011, dicha firma comercializó 883.000 coches en el mercado chino, lo que representa un 27 por ciento de sus ventas en todo el mundo . En el caso de Honda supone el 20 por ciento y, en el de Mazda, el 18 por ciento.

Toyota, el mayor fabricante de Japón, va a tener difícil cumplir su objetivo de entregar este año un millón de coches en China, que suma un 12 por ciento de sus ventas globales. En 2011 casi llegó a los 900.000 vehículos y, durante los nueve primeros meses del año, sus ventas habían aumentado un 4,6 por ciento hasta alcanzar los 640.200 vehículos, pero el boicot contra los productos nipones que ha traído la crisis diplomática menguará dichas cifras.

Según un estudio de JP Morgan , las exportaciones de coches japoneses a China se desplomarán un 70 por ciento entre octubre y diciembre por el conflicto territorial entre ambos países. A tenor de dicha previsión, las exportaciones de componentes automovilísticos también caerán un 40 por ciento, casi lo mismo que los productos electrónicos. En total, el impacto del boicot chino a la economía nipona podría costarle 0,8 puntos porcentuales de su Producto Interior Bruto (PIB), lo que supone un fuerte varapalo para su ansiada recuperación tras el devastador tsunami del año pasado.

Además, el número de turistas chinos en Japón ha caído un 70 por ciento. La aerolínea nipona ANA , que destina a China un cuarto de sus vuelos internacionales, ha visto cancelados 43.000 billetes entre septiembre y finales de noviembre.

Según la agencia estatal de noticias Xinhua, más de 100.000 turistas chinos han anulado sus vacaciones en Japón y los viajes en grupo han bajado un 40 por ciento, lo que sin duda impactará en las ventas de artículos de lujo y las reservas en balnearios de aguas termales y «resorts» de ski nipones.

A pesar del odio histórico que los chinos sienten hacia Japón por las atrocidades cometidas durante la ocupación nipona, que duró desde 1931 hasta 1945, el comercio entre ambos países alcanzó el año pasado una cifra récord de 340.000 millones de dólares (262.800 millones de euros). Gracias a su extraordinario crecimiento económico, China es el principal mercado para las empresas japonesas , que se han asentado en este país construyendo fábricas de coches y aparatos electrónicos, muchas de las cuales tuvieron que cerrar y parar su producción durante las masivas protestas antiniponas.