Cameron vetará los presupuestos de la UE si no se contiene el gasto
Las medidas para impulsar el crecimiento económico centran la celebración del congreso anual del Partido Conservador
El primer ministro británico, David Cameron, aprovechó la inauguración del congreso anual del Partido Conservador en Birminghan para reforzar su discurso euroescéptico y contentar al núcleo duro que no comulga con las directrices marcadas desde Bruselas. En un momento decisivo para la Unión Europea, con la negociación de su próximo presupuesto para 2014-2020 sobre la mesa, Cameron adelantó que no tendrá ningún reparo en emplear el veto británico en el caso de que se proponga incrementar de forma escandalosa el gasto para los próximos años. «Si hay que decir 'no' a un tratado que no sea adecuado para el Reino Unido, diré no» , señaló categórico el líder conservador en una entrevista concedida al diario Sunday Telegraph, sobre el debate de inversiones y gastos que habrá el próximo mes en Bruselas.
El «Premier» británico aboga por una Unión Europea en la que coexistan dos presupuestos separados : uno para los 17 países que conforman la eurozona y otro para los diez -entre ellos el Reino Unido- que se encuentran fuera de la moneda única. Esta propuesta es más que bienvenida desde la poderosa ala antieuropea de su Partido que pugna por un referendo sobre el futuro del país dentro de la Unión Europea.
A la vez que Cameron complace a los miembros de su partido, se expone a provocar fricciones con los liberaldemócratas liderados por Nick Clegg , partidarios de incrementar los vínculos entre Londres y la UE. El pasado diciembre, el Reino Unido se alzó como el único de los 27 países de la Unión que rechazó un pacto fiscal para superar la crisis en la eurozona debido a que no se aceptaron las salvaguardas que pedía para la «City».
Las voces críticas con el «premier» británico cada vez son más numerosas y, no sólo, dentro del partido con el que gobierna en coalición. En las quinielas políticas, muchos auguran que Cameron ya no será representante de los «tories» en las elecciones de 2015 . La popularidad del primer edil se ve acechada por el actual alcalde de Londres, Boris Johnson, que sigue aumentando sus simpatías entre el bloque duro del partido y es ya uno de los políticos más populares en las calles de Reino Unido,sobe todo, a raíz del éxito de los Juegos Olímpicos de Londres este verano.
Por ello, Cameron busca ahora desplegar todas sus opciones durante los próximos cuatro días en los que proseguirá la celebración del congreso anual de su partido. Sin duda, la ocasión de oro para tranquilizar tanto a sus dubitativos correligionarios como al decepcionado electorado y, sobre todo, contrarrestar el éxito cosechado hace unos días en Manchester por los laboristas , el principal partido de la oposición. Su líder, Ed Miliband, presentó a su equipo como la única formación capaz de lograr la unidad nacional para salir de la crisis sin divisiones y regresar a la prosperidad.
Doble recesión
Reino Unido se encuentra actualmente en una doble recesión con dos trimestres consecutivos de contracción económica. En el primer trimestre del año y según datos difundidos por la Oficina Nacional de Estadística (ONS), el PIB británico volvió a caer con cifras parecidas a las del pasado año , otro 0,2%. En el segundo trimestre, este se disparó hasta el 0,7%.
Este contexto cuestiona la eficacia del plan de austeridad aplicado por el Ejecutivo para estimular el crecimiento, aunque el líder Tory exige tiempo para que su Gobierno pueda cumplir el objetivo de reducir la deuda pública antes de 2015. «No puedo pronosticar la economía y no puedo saber exactamente lo que ocurre diariamente con el crecimiento, pero puedo afirmar que nuestra economía se está reequilibrando », aseguró el político.
La ejecución de más medidas de austeridad y la necesidad de recortar en 2015-2016 el gasto público en otros 16.000 millones de libras (19.797 millones de euros) son otros de los proyectos esbozados por Cameron, quien aseguró, que los esfuerzos para reducir el déficit serán «justos».
Está previsto que durante las próximas jornadas, se anuncie la congelación para el próximo año en Inglaterra del «council tax» (impuesto sobre la propiedad), así como la imposición de un tope para que las tarifas de los billetes de tren no puedan aumentar más de un 1% por encima del Índice de Precios Minoristas (RPI).
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete