Sarko & Hollande a la conquista del votante de centro

Crece la incertidumbre en torno al voto joven y centrista, al que se dirigen al unísono François Hollande y Nicolas Sarkozy . El presidente intenta dar la vuelta a los sondeos de cara a la votación final de las elecciones presidenciales , que se celebrará el domingo 6 de mayo. Las encuestas anuncian una victoria del candidato socialista por 55 contra 45 % de las intenciones de voto, a una semana del voto decisivo.

Según el último sondeo Ifop / Paris Match, un 36 % de los electores centristas de la primera vuelta estarían tentados por la abstención en la segunda vuelta. Según el mismo sondeo, más de la mitad de los jóvenes que votaron extrema derecha en la primera vuelta dudan entre la abstención, Hollande o Sarkozy.

Presidente y candidato socialista se han apresurado a “recentrar” sus mitines y declaraciones, desde el viernes. Ese será su «blanco» privilegiado durante todo el fin de semana. François Bayrou , desafortunado candidato centrista, en la primera vuelta, ha dirigido una «carta abierta» a la pareja Sarkozy / Hollande. Ambos le responden sin citarlo, pero respondiendo positivamente a todas sus «inquietudes».

Bayrou estima que la restauración del equilibrio presupuestario es la «gran urgencia» de Francia . Sarkozy responde: «Reformaré la Constitución, para imponer a Francia la “regla de oro” que confirmará la convergencia fiscal del Pacto presupuestario europeo». Hollande declara: «Yo aportaré el crecimiento necesario para sanear las cuentas del Estado, que es la primera de las grandes prioridades nacionales».

Bayrou sentencia en su carta a los dos candidatos a la jefatura del Estado: «Es necesario sanear la vida política nacional». Hollande se apresura a responder: El saneamiento de la vida pública será una de las grandes prioridades de mi mandato presidencial». Sarkozy declara: «En mi programa figura de manera preferente la no acumulación de mandatos, que será la base de un saneamiento profundo de la vida política, evitando acumulación de puestos electivos...»

Los jóvenes tienen colectivamente muchas reservas de fondo sobre el funcionamiento práctico del modelo político francés. Muchos de ellos votaron extrema derecha en la primera vuelta, como muestra de «rechazo» contra toda la clase política nacional. Hollande intenta seducirlos: «Todo mi programa está orientado para devolver la esperanza a los jóvenes». Sarkozy dice cosas parecidas: «Los jóvenes son la gran esperanza de mi proyecto de Francia fuerte...»