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Los sanitarios acumularán las horas que no hagan desde el 1 de mayo

La Junta da un mes de plazo para organizar los servicios con la ampliación de jornada

H. DÍAZ

La Consejería de Sanidad ha dado «como máximo» un mes de plazo a los responsables de los hospitales y centros sanitarios, así como de las respectivas unidades, para decidir cómo van a aplicar el incremento de 2,5 horas semanales y cerrar las planillas. El consejero de Sanidad, Antonio Sáez Aguado, y el gerente de Sacyl, Eduardo García Prieto, mantuvieron ayer una reunión con los representantes sindicales en el marco de la mesa sectorial con el fin de presentarles las instrucciones y criterios que deben seguir de acuerdo a la orden remitida al Boletín Oficial de la Comunidad sobre el aumento de diez horas más mensuales para estos trabajadores y que, con toda probabilidad, se publicará el lunes 30 de abril. Con el fin de que cierren las planillas lo antes posible, y dado que la orden entrará en vigor el próximo 1 de mayo, la Consejería permitirá a los responsables sanitarios hacer una distribución «algo irregular» de esta ampliación de jornada durante los próximos dos meses con la idea de que entreguen un calendario más cerrado, incluyendo las vacaciones, de cara al segundo semestre, según explicó a ABC el gerente de Sacyl.

García Prieto detalló que ayer se pidió a las centrales sindicales que «faciliten» ese acomodo de las planillas «para que se haga lo antes posible», ya que a partir del mismo 1 de mayo se empezará a contabilizar las 37,5 horas y si no se llevan a cabo «son horas que se deben». «Lo que queremos con esta medida es incrementar la productividad diaria y ser capaces de absorber las actividades que cuando se redujo a 35 horas la jornada se realizaban de forma extrarodinaria», insistió el gerente, para quien la iniciativa persigue «eliminar los costes adicionales». Por ello consideró imprescindible que los responsables sanitarios hagan un análisis de cuáles son las necesidades de actividad que tienen en cada centro y en cada unidad y a partir de ahí realizar la planificación. De esta forma, una vez que se publique la orden y las correspondientes instrucciones, el gerente de cada centro sanitario realizará la planificación de la jornada de cada unidad de su centro, así como de sus trabajadores para presentárselo a la junta de personal o la comisión y negociar en este marco la jornada, que empezará a ser efectiva una vez firmado el acuerdo. Un periodo que, sin fecha tope, el consejero Sáez no estimó demasiado largo porque «no podemos prolongar las cosas sine die» y ayer aventuró que podría tener su aplicación material en torno al 12 de mayo.

Por su parte, los sindicatos coindieron en rechazar que la medida tenga carácter retroactivo, al tiempo que negaron el ahorro que señala la Administración, mientras que prevén una pérdida de calidad asistencial. Así lo cree el representante de CSI-CSIF, Juan Carlos García Rodilla, quien auguró más cierres de camas durante los periodos vacacionales, entre otras consecuencias. Mientras, desde Satse, su secretaria regional, Silvia Sáez, consideró que la orden está llena de «confusión» y criticó que finalmente no haya recogido una de sus viejas pretenciones, el solapamiento de jornada: «Nos han estado engañando durante los últimos tres meses», concluyó.

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