¿Cuánto ha caído (realmente) el precio de la vivienda en España?

La complejidad del sector inmobiliario en España no solo proviene del gran número de planes urbanísticos, sino también de la diversidad de fuentes que informan del precio de la vivienda. Las variables tampoco ayudan. Ignacio González, subdirector general de Estadísticas Conyunturales del INE explica en el SIMA (Salón Inmobiliario de Madrid) que siguen la metodología más fiable: el Índice de Precios de Vivienda (IPV) diferenciando entre vivienda nueva y de segunda mano y sin tener en cuenta el precio del metro cuadrado porque «depende del tamaño de las casas en venta de un trimestre a otro», argumenta González.

La fuente de Estadística para recabar los datos de los precios de venta (no se basan en los precios de oferta) está en los despachos de los notarios que firman los contratos de compraventa. González afirma que comenzaron a cotejar los precios a pie de obra, pero los promotores no querían hablar. Finalmente, desecharon la opción por poco exitosa y cara y optaron por recopilar los precios de venta en las notarías.

A los problemas para informar de los precios, se une la falta de información urbanística adecuada y la confusión en los planes, según pone de relieve Felipe Iglesias González, consultor urbanístico de Uría Méndez. «Cambian más las leyes que los planes, existe una regulación aplicable excesiva», critica Iglesias González.

En la parte de los promotores también hay descontento. Bruno Rabassa, vocal de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Madrid (Asprima) se queja de la información de la que se hace eco la Prensa y subraya que «no se pueden generalizar los titulares» porque en los datos hay que diferenciar el lugar en que se sitúa la vivienda y el tipo de casa. Rabassa también critica que no haya estadísticas sobre los precios del suelo o sobre el parque de viviendas en alquiler, entre otras carencias.

Rabassa no está de acuerdo con la generalización de los datos y reclaca que hay que mirarlos con lupa «Se dice que la vivienda cae un porcentaje determinado, pero la realidad es que en Barcelona los precios están bajando y que en Madrid han tocado suelo», indica.

La solución, según González del INE, pasaría por homogeneizar la metodología y las fuentes de las que se obtienen los precios de la vivienda. Algo que también sería importante en lo referente a legislación urbanística tal y como asegura Iglesias, de Uría Méndez: «Las comunidades deberían unificar sus leyes», sentencia.

Desde Asprima piden que los datos se estudien en detalle y que no se den informaciones globales. Admiten que existe opacidad por parte de los promotores a la hora de ofrecer algo de claridad al asunto y rechaza la propuesta de que sean ellos quienes elaboren los informes: «Los estudios son costosos y nosotros no agrupamos a todos los promotores, reconocen.