Nuevos enfrentamientos en Bahréin tras el funeral del fallecido durante los disturbios del fin de semana
Cerca de 15.000 personas asistieron al funeral de Salá Abbas Habib, que murió por heridas de perdigones
reuters/ep
Cientos de manifestantes se han enfrentado este lunes con la Policía en Bahréin tras el funeral del hombre que fue hallado muerto durante los disturbios del fin de semana , que coincidieron con la celebración en la isla del Gran Premio de Fórmula 1.
Los ... nuevos choques se han producido en el barrio de Al Bilad al Qadeem de la capital, Manama. Unas 15.000 personas se habían sumado al funeral por Salá Abbas Habib, de quien la autopsia ha determinado que falleció por las heridas de perdigones que había sufrido en el pecho y el abdomen.
Los manifestantes han lanzado piedras y artefactos incendiarios contra los agentes, mientras que las fuerzas de seguridad han respondido con gas lacrimógeno y bombas de sonido .
Habib participó en als protestas el viernes pasado por la noche, pero huyó cuando la Policía antidisturbios llegó equipada con porras, gases lacrimógenos, bombas de sonido y escopetas de perdigones para dispersar a los manifestantes y empezó a perseguirlo, según su hermano. Entonces se escondió en el tejado de un edificio, según han contado varios testigos. Allí lo encontraron muerto después.
Reformas políticas
El principal partido opositor de Bahréin, el chií Wefaq, ha reclamado a la cúpula del país, dominada por la minoría suní, que emprenda reformas hacia la democracia para evitar nuevos brotes de violencia, después de que el año pasado decenas de personas perdiesen la vida tras movilizaciones sociales.
«Queremos sentarnos y hablar con ellos, pero se niegan a comenzar un diálogo con nosotros. Ponen obstáculos y distracciones para presentar una imagen de reformas que, hoy por hoy, sólo confirman y reinstauran la dictadura», ha denunciado el principal responsable de Wefaq, Ali Salman.
En su opinión, el Gobierno «no es serio» en lo que se refiere a «un diálogo real», a través del cual debería « escuchar las peticiones del pueblo bahreiní y aplicar esas demandas, que no pueden ser ignoradas».
Salman, que ha querido negar cualquier influencia de Irán en las manifestaciones de Bahréin, ha advertido de un posible recrudecimiento de las movilizaciones. En este sentido, ha recordado que los manifestantes sólo empezaron a usar cócteles molotov tras noviembre del año pasado y, en los últimos meses, se han registrado incluso algunas bombas de origen desconocido. Por este motivo, Salman ve «lógico» que un mayor estancamiento político derive en «mayor inestabilidad».
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