Con «Memorias de mis putas tristes» concluyen las adaptaciones al cine de la obra de García Márquez
Dirigida por Henning Carlsen, la película, a concurso en el Festival de Málaga, cuenta con Ángela Molina en el reparto
Con más de seis años de histórica preparación llegó a la sección oficial del Festival de Málaga la versión cinematográfica de «Memorias de mis putas tristes» , basada en la novela de Gabriel García Márquez , que ha sido dirigida por Henning Carlsen , uno de los más prestigiosos cineastas nórdicos, con guión de Jean-Claude Carrière, Carlsen, el propio Nobel colombiano y familia -su mujer y su agente literario-, ya que una de las preocupaciones que existía era que la producción fuera consistente, con ciertos estándares de calidad, con el fin de que la distribución internacional fuera mejor que en anteriores adaptaciones.
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Fue la primera cinta elegida para participar este año en el festival. Según uno de los productores, «todos quedaron contentos con los resultados». García Márquez, por su parte, ha declarado que no quiere más interpretaciones cinematográficas de sus novelas . «Quizá por eso todos estos requisitos», comenta Ángela Molina , que forma parte del reparto junto a su hija Olivia, Geraldine Chaplin, Emilio Echevarría, Alejandra Barros y Dominika Paleta, entre otros actores. Rodada en español , al contrario que «El amor en los tiempos del cólera», que se hizo en inglés, también cumple con los deseos del escritor.
Ángela Molina sobre García Márquez
Ángela Molina tiene muy buenos recuerdos de García Márquez , de cuando rodó «Edipo alcalde», con guión del escritor, «por su generosidad y disponibilidad, pues acudió a la filmación. Trabajar con él en el texto era maravilloso. En alguna ocasión yo le hablaba sobre alguna frase que era demasiado rica para que pareciera real. Sobre la marcha creaba algo prodigioso con una belleza despierta que encajaba perfectamente en lo que yo estaba representando. Viví muchos momentos con él y nuestro recordado Paco Rabal. En esta película no ha podido venir al rodaje al estar enfermo, pero le hemos presentido constantemente a lo largo de esta historia de amor que va más allá de los límites del tiempo».
Por otra parte, también se presentó en el festival «Kanimambo» , una propuesta de tres directores : Abdelatif Hwidar, Carla Subirana y Adan Aliago, con tres «ejercicios» cinematográficos y un denominador común: narrar en primera persona las experiencias que tuvieron en Monzambique, un país desconocido para ellos que les ha calado por la autenticidad de sus gentes. Un país marcado por la guerra civil, la pobreza y la enfermedad que desde nuestra perspectiva consigue que veamos en los hombres y mujeres que desfilan por la pantalla auténticos héroes de lo cotidiano, donde domina la lucha por conseguir una vida mejor. Unas veces con actores, otras con gente del pueblo, este trabajo ha cosechado el aplauso unánime de los asistentes a la proyección.
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