CiU bendice a los promotores del referendo de independencia

Oriol Junqueras (ERC) o Alfons López Tena (Solidaritat), la presidenta de Òmnium Cultural, Muriel Casals —entidad a la que el Govern acaba de otorgar una subvención de 1,4 millones de euros—, y el secretario general de la UGT de Cataluña, Josep Maria Álvare, acudieron a la constitución de esta Asamblea, que se presenta como heredera de la primera consulta soberanista celebrada en Arenys de Munt (Barcelona) en 2009.

Todavía no hay calendario de las acciones que esta nueva plataforma pretende llevar a cabo de aquí a 2014 —año en el que se cumplen 300 años del decreto de nueva planta que suprimió las instituciones catalanas—, pero además de su deseo de exprimir las posibilidades de la futura ley de consultas populares elaborada por el gobierno autonómico, los promotores de la Asamblea quieren convocar una manifestación independentista en el Paseo de Gràcia de Barcelona el próximo 11 de septiembre, Diada Nacional de Cataluña. En su manifiesto, esta organización denuncia los «continuos intentos de asimilación» de Cataluña por parte de España y la constante negativa del Estado español de reconocer esta comunidad autónoma como nación.

La Asamblea nace con vocación de actuar sin ser instrumentalizada por los partidos políticos. Pero las reacciones fueron inmediatas. El primer secretario del PSC, Pere Navarro, se desmarcó de la Asamblea por considerar que ésta defiende un proyecto diferente al de los socialistas, partidarios del encaje de Cataluña en una España federal. Por su parte, el portavoz parlamentario del PPC, Enric Millo, considera este movimiento «minoritario», puesto que «no representa en absoluto el sentimiento general, el de los que se sienten tan catalanes como españoles».