Calcetines para creativos
Rayas, lunares, colores vivos... La moda de los calcetines llamativos causa furor entre los ejecutivos de Sillicon Valley, los más originales y glamourosos del mundo
En el mundo de la empresa, el traje y la corbata es el uniforme obligatorio. En Silicon Valley esas prendas de ropa representan lo más opuesto a sus principios. En el valle la individualidad prima frente a la uniformidad, la creatividad frente a la falta de imaginación y los vaqueros, las sudaderas y las zapatillas deportivas son las prendas preferidas por los emprendedores de esta comarca californiana, la más innovadora del mundo. Pero, paradojas de la vida, al final esa ropa con un aura de informalidad y pasotismo también se ha convertido en un uniforme impuesto sutilmente por los pioneros a todos aquellos que quieran integrarse en una zona que simboliza como pocas el éxito.
Hoy, aquellos que aún quieren expresar su idiosincrasia valiéndose de la ropa han encontrado un resquicio de esperanza en los calcetines. Si los pies soportan todo el peso de una persona, la prenda que los recubre se ha convertido en el catalizador de su personalidad , el último lienzo en blanco donde desafiar al «establishment».
Uno de ellos es Hunter Walk, quien trabaja para YouTube como director de gestión de producto. Walk explicó a « The New York Times » que los calcetines se están convirtiendo en una rebelión y quienes participan en ella saben identificarse unos a otros con un simple gesto: subirse una pernera y mostrar sus calcetines.
Otro es Travis Kalanick. El cofundador y director ejecutivo de Uber explicó al mismo diario que empezó a escoger calcetines llamativos cuando en su anterior trabajo tenía que vestirse de traje para acudir a reuniones con altos ejecutivos de compañías interesadas en adquirir sus servicios. « Quería mantener parte de mi estilo de informático sin que la gente pensase que estaba loco », detalla este ingeniero informático de 35 años.
El que parece no seguir la tendencia es Mark Zuckerberg. El creador de Facebook sigue siendo fiel a los calcetines de deporte blancos. Pero también él ha hecho progresos: ahora ya no los combina con sus chanclas Adidas azul marino, sino con zapatillas de deporte.
De colores chillones, rayas o lunares. Que los calcetines con estampados estrafalarios estén haciendo furor en Silicon Valley tiene mucha lógica para los estudiosos de la inteligencia colectiva. El periodista Wray Herbert explora en su artículo «¿Tienes una idea original? Poco probable», publicado en la revista « Scientific American », lo que la moda nos revela sobre la federación de ideas. Herbert toma el sector de la moda como un ejemplo para demostrar que hay pocas personas realmente originales e innovadoras en todos los aspectos , incluido el vestir; y que lo que parecen actos espontáneos de creatividad son en realidad el resultado de «complejos patrones de comportamiento colectivo».
«Los calcetines son a Silicon Valley lo que las corbatas a Wall Street», explica KarloKarlo, un asesor de imagen y maquillador neoyorquino que cree que aún es temprano para saber si esta es una tendencia que ha llegado para quedarse o no. Según este experto en moda, los destellos de color en el vestir siempre han prevalecido en el hombre europeo, en comparación con el vestir más aburrido del estadounidense. «Cualquier asomo divertido que no sea considerado como una amenaza será siempre bienvenido», matiza. Y es que aún hay empresas cuyos códigos de vestimenta reprimen el uso de prendas disonantes, incluidos los calcetines.
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