Dos muertos en una reyerta en pleno centro de Badajoz

Dos personas han muerto esta mañana en un grave altercado en pleno centro de Badajoz. Los hechos han ocurrido en torno a las doce del mediodía, al producirse una reyerta en el número 30 de la calle Muñoz Torrero, en uno de los pisos de arriba del bar El Farol, en el Casco Antiguo. Además de los dos hombres fallecidos, ha resultado herido de gravedad un tercero, según ha confirmado la Policía Nacional. Los tres implicados tendrían aproximadamente una media de edad de entre 30 y 40 años.

La Policía investiga los hechos sucedidos en este domicilio próximo a la calle Francisco Pizarro, en la prolongación de Menacho. El nuevo delegado del Gobierno en Extremadura, Alejandro Ramírez del Molino, se ha desplazado al lugar de los hechos, donde se ha despertado una gran expectación entre el vecindario. Ramírez del Molino ha asegurado que ninguno de los implicados era familia entre ellos y ha indicado que uno de los fallecidos podría ser de origen árabe. Además, ha adelantado que la reyerta "podría tratarse de un ajuste de cuentas" y que alguno de ellos tendría antecedentes policiales.

La autoridad judicial competente ha decretado ya el secreto de sumario, toda vez que el supuesto autor del doble crimen está custodiado por agentes de la Policía Nacional mientras recibe atención médica en el Hospital Infanta Cristina. Ha agregado que, a falta de otros detalles que desvele la autopsia que se realizará mañana, está confirmado que uno de los cadáveres presenta una herida en el abdomen.

Los dos muertos fueron agredidos con un arma punzante, al igual que el herido, que ha sido trasladado al Hospital Infanta Cristina, custodiado por la Policía Nacional. Tiene unos 30 años de edad y presenta en principio una herida punzante detrás de una rodilla.

En el vecindario se comenta que se veía entrar en el portal a gente joven de manera constante, pero nunca se había visto nada sospechoso que hiciera pensar que se iban a registrar unos hechos tan graves. La calle, que es peatonal como tantas otras del Casco Antiguo, está literalmente ‘tomada’ por la Policía Judicial y la Policía Científica.