El Papa hace balance de la JMJ: «Un don que da esperanza al futuro de la Iglesia»

Para Benedicto XVI, la JMJ , que presidió desde el 18 al 21 de agosto, "ha sido un evento eclesial emocionante, donde cerca de dos millones de jóvenes (...) han vivido con alegría una formidable experiencia de fraternidad y de encuentro con el Señor".

"El encuentro de Madrid ha sido un estupenda manifestación de la fe para España, para todo el mundo y para todos", exclamó. Según el papa, "para los jóvenes provenientes de todos los rincones de la tierra han sido una ocasión para reflexionar, dialogar, intercambiar experiencias, rezar juntos y renovar el empeño de una vida en Cristo",

También durante la audiencia celebrada en la residencia pontificia de Castel Gandolfo, agradeció a "quienes han trabajado generosamente en esta jornada" y mostró su reconocimiento hacia los componentes de la Iglesia española, las autoridades, instituciones y asociaciones del país.

Asimismo, también recordó "la calurosa acogida" que recibió por parte de los reyes de España y de todo el país. El pontífice rememoró los diferentes actos en los que participó y destacó el "entusiasmo incontenible" con el que los jóvenes le acogieron el primer día en la plaza de Cibeles.

También habló de su visita al Monasterio del Escorial, donde encontró a las jóvenes religiosas y de las que destacó "el entusiasmo y la voluntad de seguir al señor". Mientras que de su encuentro con los profesores universitarios agregó que les recordó que a los jóvenes "no solo hay que enseñarles el conocimiento sino, sobre todo, formar la propia persona, empujarles a la búsqueda de la verdad, no sólo con las palabras sino también con la vida".

El papa Joseph Ratzinger repasó también el Vía Crucis, "donde una multitud de jóvenes ha revivido con intensa participación las escenas de la pasión y la muerte de Cristo". Al recordar la misa en la catedral de la Almudena con los seminaristas, Ratzinger deseó que "crezcan las vocaciones en el sacerdocio" entre los participantes a la JMJ y aseguró que entre los presentes "había jóvenes que habían oído la llamada del señor en las anteriores Jornadas de la Juventud".

"Estoy seguro de que también en Madrid el señor ha llamado a la puerta del corazón de muchos jóvenes y que le seguirán con generosidad en el ministerio sacerdotal o en la vida religiosa", agregó. El papa destacó el "testimonio silencioso de la caridad" de los voluntarios que trabajan en el centro de discapacitados que visitó, y señaló "la multitud en fiesta para nada temerosa de la lluvia y del viento" durante la vigila nocturna en la explanada de Cuatro Vientos. Benedicto XVI anunció que el lema para la próxima Jornada Mundial de la Juventud católica , que se celebrará en Río de Janeiro (Brasil), será "Id, y haced discípulos a todas las naciones".