Zapatero advierte a los barones que piensa ir a sus mítines

José Luis Rodríguez Zapatero dio anoche muestras de que no está dispuestos a dar un paso atrás ante las elecciones autonómicas y municipales del 22 de mayo, pese a las presiones de los barones y de un sector del PSOE para que desvele ya su futuro y no perjudique las expectativas electorales del partido.

Recabada su opinión sobre si su presencia en los mítines socialistas suma o resta, Zapatero ha advertido a los dirigentes que hará campaña —ayer ABC adelantaba que la Dirección Federal le está preparando una docena de apariciones, principalmente en fin de semana— porque «todo apoyo es bueno para un candidato».

Fue durante una rueda de prensa con el primer ministro polaco, Donald Tusk, cuando el presidente del Gobierno, que últimamente evita hablar de la sucesión, se explayó. Incluso ironizó con el hecho de que se le olvidara responder en primera instancia incluso bromeó sobre el tema —«¿Es normal que esta se me olvidara, no?»—, pero acto seguido recordó a su partido que él ha ganado dos elecciones generales (2000 y 2004): «La trayectoria política de cada uno está ahí y son los electores quienes la juzgan».

«A mí me han juzgado en más de una ocasión, y ahora voy a tratar de que a los compañeros que concurren a las elecciones les vaya lo mejor posible. Les daré todo mi apoyo. Todo apoyo es bueno para un candidato, y yo se lo voy a dar; en fin, pues con todas mis ganas, como siempre», recalcó.

Mientras, en el PSOE sigue el desconcierto sobre el calendario de su líder. Ayer, Guillermo Fernández Vara negó la mayor. El presidente extremeño comentó que la anulación del mitin en la plaza de toros de Vistalegre (Madrid) el 3 de abril, causante de un aumento notable en la incertidumbre sucesoria, es «uno de esos temas que son debates fuera, pero no lo está siendo dentro» del PSOE.

El presidente castellano-manchego, José María Barreda, uno de los más activos, junto con el extremeño, Guillermo Fernández Vara, a la hora de exigir a Zapatero que despeje la duda antes del 22-M, ayer ya no ponía fechas: «Tiene una decisión tomada y él administrará sus tiempos». Aunque el miércoles «se escabulló en los pasillos del Congreso», tendrá «muchas oportunidades para decirlo». «Lo mejor es no interferir. No empujar».

Barreda ya asume que el jefe del Ejecutivo irá a un mitin en «probablemente en Albacete» y que ambos tendrán que hacerse la foto en un momento en que la figura de Zapatero está fuertemente cuestionada en los sondeos. Mientras, el Grupo Socialista del Congreso sigue dividido entre quienes piensan que Zapatero debe decir ya que no se presentará a la reeleccion en 2012 y quienes son partidarios de esperar a ver los resultados autonómicos y municipales. Estos últimos argumentan que, pese a lo que digan las encuestas, el 22-M se va a producir un empate PSOE-PP y eso le permitirá anunciar su marcha de forma más airosa.