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Volkswagen y la tecnología TDI, 20 años de la mano

La inyección directa y la sobrealimentación se unieron por primera vez en un motor diésel en 1989 cuando Audi presentó el primer TDI en el Salón de Frankfurt

ANTONIO CAMPOS
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Los coches con motor diésel han experimentado una revolución en su eficiencia, gracias a la investigación de los fabricantes, para que sean más límpios y reducir su consumo. El año 1989 se convierte en un punto de referencia para la tecnología TDI cuando Audi presenta en el Salón del Automóvil de Frankfurt un motor que combina la inyección directa y la sobrealimentación. Desde entonces es todo un referente en materia diésel.

Turbo Diesel Injection, o más conocido como TDI, unas siglas que han revolucionado el concepto del motor diésel para los turismos y que ya cuentan con una historia de 20 años, pues fue en el mes de septiembre de 1989 cuando Audi presentaba esta avanzada tecnología en el Salón del Automóvil de Frankfurt, en Alemania.

El primer motor que utilizaba la tecnología TDI era uno de cinco cilindros y 2.5 litros que se montó en el Audi 100 TDI que inició la producción en 1990, y que gracias a la utilización de la inyección directa y un turbocompresor alcanzaba una potencia de 120 CV, con los que alcanzaba los 200 km/h –frente a los 185 km/h del Audi 100 2.0 TD- y se obtenía una reducción del consumo de combustible entre un 10 y un 15%.

Un salto abismal que sirvió para cambiar la percepción que el público tenía de los motores diésel en todo el continente europeo. Los tradicionales motores de inyección con precámara pasaban a la historia, y sólo se conservaba de ellos su longevidad, a lo que había que añadir un nivel más elevado de potencia, agilidad y confort, además de una notable reducción en el consumo.

La tecnología TDI se ha extendido en estos años a todo tipo de vehículos dentro del grupo Volkswagen, y está disponible desde el Audi Q7 V12 TDI de 500 CV al modesto SEAT Ibiza 1.4 TDI de 80 CV, con precios más competitivos y unos niveles de emisiones muy bajos respecto a los modelos iniciales.

Su aportación a la dieselización del parque automovilístico ha sido muy importante, y la prueba está en que todos los fabricantes han seguido el mismo camino con tecnologías similares, hasta el punto de que en algunos segmentos de vehículos las ventas de los motores diésel acaparan hasta un 90% del total.

Otro hito importante en la historia de los motores TDI se produjo en el año 1997 con el primer motor diésel de inyección directa con seis cilindros, cuatro válvulas por cilindro y una potencia de 150 CV, que lo convertía en el TDI más potente del momento.

En 1999 se alcanzaba la cifra de un millón de motores TDI fabricados y Audi aprovechaba para presentar la tecnología inyector-bomba, un sistema muy compacto que permitía generar presiones de inyección hasta ahora desconocidas: 2.050 bares. Con esta tecnología, el motor 1.9 TDI alcanzaba 130 CV gracias a un turbo de geometría variable. Fue también en 1999 cuando Audi presentó el primer motor V8 TDI con una potencia de 200 CV y también mostraba el A2 con un motor TDI de tres cilindros que homologaba un consumo medio de 3 litros a los 100 kilómetros.

Las bombas rotativas han sido sustituidas por la tecnología common-rail desde 2004, y en 2005 se superaba la barrera de los 300 CV con un motor TDI, el 4.2 V8 de 326 CV. Pero el máximo exponente en el terreno deportivo llegó en junio de 2006 cuando Audi inscribía el prototipo R10 en las 24 horas de Le Mans con un motor V12 que se hizo con la victoria en los años 2007 y 2008 y que ha servido de base para el motor diésel más potente de su historia montado en el Q7 V12 TDI, con 500 CV y un par constante de 1.000 Nm entre 1.750 y 3.000 rpm.

La gama actual de motores TDI de Audi se compone de bloques de cuatro, seis, ocho y doce cilindros, con potencias entre 105 y 500 CV, con más de treinta variantes asociadas a distintos tipos de cambio y carrocerías. Su aceptación es tan alta que hasta se han permitido en los cabrios por la suavidad de funcionamiento y el bajo nivel de ruido y vibraciones que se ha logrado.

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