Zapatero justifica el Estado de Alarma por la «rebeldía» de los controladores frente a la Constitución

Lo ha dicho en su discurso al Congreso para explicar el «gravísimo conflicto» de gestión aérea vivido desde el pasado día 4, inicio del Puente de la Constitución.

Zapatero ha explicado que la «rebeldía» de los controladores, desde las 15.00 del viernes 3, hasta las 15.00 del sábado 4, cuando se les movilizó y se les amenazó con aplicar el Código de Justicia Militar, originó una «considerable y creciente alama social» y supuso «una afrenta al orden público constitucional y como tal había que abordarla».

En esas circunstancias, prosiguió, el Gobierno decidió en Consejo de Ministros extraordinario, aplicar el Estado de Alarma por la paralizacón de un servicio público, como regula el artículo 12.2 de la Ley de Estado excepcionales de 1981. Frente a las críticas de diversos juristas, que opinan que a los controladores no les es aplicable el Código de Justicia Militar si no es bajo estado de excepción o sitio, el presidente del Gobierno comentó que no existiendo normativa reguladora de la movilización de personal civil en empresas y servicios, «el único derecho supletorio aplicable a la materia» es el artículo 8 del Código penal Militar.

Antes de llegar a ello, insisitió el jefe del Ejecutivo, el Gobierno «agotó las alternativas menos gravosas», como fueron las reuniones que mantuvo el ministro de Fomento con el sindicato de controladores (USCA) en la tarde el viernes 3 y a la 1.30 del sábado 4. Cuando comprobó que los controladores no deponían su actitud, decidió convocar el Consejo de Ministros extraordinario para decretar el estado de Alarma.

«Es el momento de recordar, señorías —dijo Zapatero al Pleno— que las medidas adoptadas en el marco del estado de alarma han dado resultado y han conseguido lo que no había sido posible con las facutades ordinarias del Gobierno».