Génova instruyó a su Comité disciplinario para que no entrara en la crisis asturiana

Una de las medidas tomadas para intentar rebajar la tensión en torno de esta cuestión fue cursar al comité de Derechos y de Garantías la instrucción de que no se metiera en el conflicto, según ha podido saber ABC de fuentes populares. Todo ello a pesar de los requerimientos que se le han hecho a este órgano desde Asturias, en concreto desde los partidarios de Cascos, que han visto con estupor como, por ejemplo, el alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, comparaba su campaña a favor del ex vicepresidente con la «kale borroka».

También acusan a parte de la dirección asturiana, que no toda, de haber tomado decisiones sin convocar a los órganos del partido, entre ellas la de la candidatura de la ovetense Isabel Pérez-Espinosa, que se propuso a Génova sin convocar ni al comité de listas ni a la ejecutiva ni a la Junta Directiva Regional.

Este sector se queja de indefensión por parte de la dirección nacional, que en cambio sí abrió expedientes en su día al vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, y al que fuera mano derecha de Francisco Camps, Ricardo Costa, al primero por unas duras declaraciones contra Esperanza Aguirre, y al segundo por atribuirse el desempeño de un cargo del que supuestamente había sido cesado.

Ni siquiera la mediación del que fuera también vicepresidente del Gobierno y actual presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato, ha servido para serenar las aguas internas.

Las espadas siguen en alto a pesar de que la agenda obliga a tomar una decisión más pronto que tarde. Génova espera que pasen las elecciones catalanas del día 28 para cerrar este asunto, pero ha sido tanto el tiempo que se ha dejado pasar y se han enconado tanto las posiciones que sea la decisión que sea no será sin rupturas ni traumas. En el cuartel general de los populares hacen un análisis breve pero certero: «sólo tenemos dos problemas, Valencia y Asturias» y a ambos deben darle solución cuanto antes.