Bolsas de ganchillo para lidiar con el toro

Tras la abolición de las corridas, el Govern pretende ahora erradicar las figuras de toros y flamencas con una guía de 120 «souvenirs» identitarios que incluye bolsas de lana del Pirineo y piezas gaudinianas

MARÍA JESÚS CAÑIZARES

19/08/2010
Actualizado a las 09:20h.

«Y ahora, a por las muñecas flamencas». Este fue el grito de guerra de ERC cuando, a finales del mes de julio, prosperó en el Parlamento catalán la prohibición de las corridas de toros. Pero hace años que los republicanos mantienen una cruzada contra ... el consumo de españolidad en forma de «souvenir» ya que, a pesar de los esfuerzos del concejal de ERC Jordi Portabella por erradicar la venta de sombreros mejicanos, flamenquillas y figuras de toros de las tiendas de las Ramblas de Barcelona, estos objetos siguen teniendo bastante éxito entre los turistas extranjeros que visitan Cataluña. El consejero de Innovación, Universidades y Consumo, Josep Huguet, se ha sumado a esa batalla y se ha embarcado en la búsqueda de iconos identitarios capaces de luchar contra ese potente márketing que, a su juicio, no refleja la realidad catalana.

Huguet anunció ayer, en el marco de la 42 Universitat Catalana d'Estiu que se celebra estos días en Prada de Conflent (Francia), que en el próximo mes de septiembre se editará un catálogo con 120 productos «made in Catalunya» con el objetivo de que puedan hacerse un hueco en el imaginario turístico catalán. El catálogo será elaborado conjuntamente por el Instituto de Estudios Catalanes, Fomento de las Artes Decorativas y el Museo Nacional de Arte de Cataluña e incluye referencias de iconos representativos del arte, la industria, el ámbito rural y la gastronomía entre muchos otros.

Puntos de venta

El Gobierno catalán quiere extender los puntos de venta de estos productos a hoteles, oficinas de información, tiendas de museos y a la red de Centros de Acogida Turística (CAT). Ahora hay cinco centros en funcionamiento y prevé llegar a la decena. Asimismo, hace un mes que se inauguró en Barcelona la tienda «Empremtes de Catalunya», especializada en esos iconos catalanes. En estos establecimientos destacan abanicos con estampado inspirado en el arte románico, piezas modernistas, bolsas de lana del Pirineo y complementos de ganchillo, entre otros. El precio actual de estas piezas no es barato: una cúpula gaudiniana cuesta 50 euros y un juego de cuatro marionetas de la «caputxeta vermella», 110 euros. Los «correfocs» y los «castells» también serán protagonistas de ese márketing catalán.

Huguet admitió que el proyecto no dará resultados inmediatos, por lo que prevé que en 10 ó 15 años, esos iconos catalanes podrán dejar algún tipo de impronta en los turistas. Aunque en un principio se potenciará el carácter artesano de los mismos, posteriormente se introducirán copias en el mercado con un nivel más bajo. «Será el turista el que tendrá que decidir, pero por lo menos serán productos representativos de Cataluña y no sombreros mejicanos», dijo el dirigente republicano, quien negó que la campaña de la Generalitat pretendar erradicar las figuras de toros y de mujeres bailando sevillanas. «Ni puedo ni quiero prohibir nada, hago lo que hacemos todos, que es promover lo nuestro», precisó.

El consejero explicó que durante los dos años, un grupo de expertos ha analizado qué imágenes podían asociarse más a la marca de país de Cataluña. «La identidad es fundamental en el mercado global, sin ella no vendes nada», afirmó.