Un sheriff de Luisiana ha pedido ayuda a Inmigración porque sospecha que los voluntarios que se han desplazado a la zona para ser contratados en las labores de limpieza podrían ser delincuentes.
Habitantes de Alabama llevaron a cabo una vigilia en Fairhope ayer | EFE
Agentes del Servicio de Inmigración de Estados Unidos se han trasladado en los últimos días a las zonas afectadas por el vertido de petróleo en las costas del Golfo de México a petición de un sheriff de Nueva Orleans que sostiene que entre los numerosos inmigrantes que se han trasladado a la zona para ser contratados en las tareas de limpieza podrían llegar delincuentes del crimen organizado extranjeros.
Jack Stevens, sheriff de la parroquia de St. Bernard Parish -situada en el corazón de las zonas pantanosas de Luisiana, una de las más afectadas por el desastre- ha asegurado a la revista «ColorLines» que algo similar ocurrió en 2005, tras el Katrina. El huracán provocó más de 1.800 fallecimientos confirmados, 700 personas fueron declaradas desaparecidas y los daños materiales superaron los 75.000 millones de dólares.
El Servicio de Inmigración tiene capacidad para comprobar los antecedentes de los ciudadanos extranjeros desplazados al estado, algunos de ellos en situación irregular.
El Gobierno británico ayudará a BP
El primer ministro de Reino Unido, David Cameron, ha afirmado que su Gobierno está dispuesto a ayudar a la petrolera británica BP a limpiar el vertido de petróleo que contamina el Golfo de México.
Durante una visita a Afganistán, Cameron ha manifestado entender a la perfección la frustración de Estados Unidos ante tamaña catástrofe medioambiental. «Estoy seguro de que el presidente estadounidense y yo hablaremos de BP y sobre lo que ha ocurrido junto a la costa del Golfo a lo largo de las reuniones y llamadas que intercambiemos estos días», declaró a los periodistas.