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Desaparecida entre «latin king»

Los padres de Andy Lisett, atemorizados porque creen que escapó con una amiga que pertenece a la banda y de la que intentaron separarla

Cada día que pasa, la angustia de los padres de Andy Lisett, de 15 años, aumenta. Hace 17 días que la menor se marchó de casa de forma voluntaria y salvo una llamada telefónica que realizó el 21 de abril, no han vuelto a tener noticias de ella.

Ocurrió el 15 de abril. La niña, estudiante de tercero de ESO, no fue a recoger por la tarde al colegio a su hermana pequeña, de 12 años. Ésta regresó sola a casa y Andy no apareció. Sus padres, Luis y Mariela, una pareja ecuatoriana que reside en Puente de Vallecas, encontraron una nota de su hija en la que decía que se iba de casa. «Ella nunca había hecho nada semejante. No se ha llevado nada. Ni ropa ni documentación ni dinero», explica a ABC Luis, su padre. Éste explicó que su hija no iba muy bien en los estudios y que especialmente su madre estaba siempre encima de ella, circunstancia que podría haber influido, a su juicio, en lo sucedido.

«Papi, papi, estoy bien»

Se da la circunstancia de que Andrea, una amiga de su hija, ecuatoriana, de 16 años, desapareció el mismo día que Andy. «Deben estar juntas. Fuimos a su casa y su madre nos dijo que no sabe dónde está su hija. Desapareció el mismo día que la nuestra. Sin embargo, ella no se fue con las manos vacías. Iba preparada».

Añade que Andrea se ha ausentado varias veces de su casa y del colegio. «Tenía problemas con su madre por eso, es algo conflictiva». Luis, que se desplazó a Sevilla, donde se produjo la única llamada que ha hecho Andy hace once días, desde una cabina telefónica ha inundado la ciudad de carteles, sin hallar ninguna nueva pista.

«Me dijo papi, papi, no te preocupes estoy bien y colgó», dice visiblemente preocupado. «El teléfono estaba en Triana, cerca del recinto ferial. Podría haber ido allí, a la feria con Andrea para conocer a alguien a través de internet», aventura.

Su preocupación va en aumento a medida que pasa el tiempo. «La otra niña con la que se ha ido, Andrea, es latin king por los objetos que hemos visto en su casa. Y en los últimos tiempos nuestra hija realizaba el saludo que hacen ellos, la uve invertida, e incluso cambió de aspecto. Se rapó las cejas en los laterales. Tememos que la amenacen y la obliguen a hacer algo», dijo.

«¿Y si llegamos tarde?»

Luis explicó que su hija nunca había tenido problemas con los estudios hasta este curso. «La cambiamos de instituto porque no nos gustaban algunas compañías que tenía, entre ellas, Andrea. Había peleas entre bandas y ella se asustaba. Y mira...», suspira.

Mariola tiene un mal presentimiento y piensa que tienen a su hija retenida porque vio algo negativo en la otra niña y quiso separarse de ella sin éxito.

Esta familia ha inundado de carteles su barrio. «La Policía nos dice que esperemos. ¿A que le ocurra algo y sea tarde? Estamos desesperados. La pequeña no quiere ir al cole, mi mujer ha perdido el trabajo por buscar a Andy...».

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