Algunos senadores estadounidenses, en cambio, consideran que «no se trata de un hecho aislado» y lamentan la decisión de Obama de de poner fin a la moratoria de dos décadas en la exploración por hidrocarburos en zonas marinas próximas a las costas de EE.UU..

Imagen de la explosión de la plataforma petrolífera situada en el Golfo de México | REUTERS
México «no prevé un impacto directo o inmediato» en sus aguas o costas por el derrame de crudo tras la explosión y hundimiento de la plataforma de perforación Deepwater Horizon, en las costas del estado de Luisiana (EE.UU.), en el Golfo de México, afirmó hoy a Efe una fuente oficial.
Fernando Morales, portavoz de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) mencionó que sus argumentos se basan en inspecciones efectuadas por la Semarnat centradas en la dirección y las características de las corrientes de la región del Golfo.
No obstante, la Semarnat «se mantiene alerta ante cualquier cambio en el desplazamiento de la mancha de crudo, así como del posible impacto que ésta pueda generar al medio ambiente», indicó.
«No es un incidente aislado»
La semana pasada la plataforma de perforación Deepwater explotó y se hundió, lo que produjo un derrame de crudo que cubre ya unos 1.500 kilómetros cuadrados y se encuentra a unos 110 kilómetros de las costas de Misisipi y Alabama.
Los senadores demócratas Robert Menéndez, Frank Lautenberg y Bill Nelson afirmaron que la explosión de la plataforma no es sólo una tragedia para los familiares de las víctimas -11 de los 126 trabajadores que estaban a bordo continúan desaparecidos y se ha suspendido la búsqueda-, sino también un recordatorio de los riesgos reales de la exploración petrolera.
«La explosión, el incendio consiguiente, y el permanente vertido -del pozo emergen unos 1.000 barriles diarios de petróleo, más de 160.000- plantean serios interrogantes acerca de las afirmaciones de la industria de que sus operaciones y la tecnología son lo bastante seguras como para poner plataformas en zonas ambientalmente delicadas o cruciales para el turismo y la industria pesquera», indicaron los senadores.
«Éste puede ser el peor desastre de los últimos años, pero con seguridad no es un incidente aislado», agregaron. Los políticos lamentaron la decisión adoptada por Barack Obama el 31 de marzo de poner fin a la moratoria de dos décadas en la exploración por hidrocarburos en zonas marinas próximas a las costas de EE.UU..