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Calurosa bienvenida al Papa en Malta

El pueblo de Malta dedicó hoy al Papa una calurosa y entusiasta acogida a su llegada a la isla, donde esta tarde inició el XIV viaje apostólico fuera de Italia de su Pontificado. La visita llega en medio de la polémica que está generando la aparición de numerosos casos de pedofilia protagonizados por miembros del clero en diversos países, aunque Benedicto XVI sólo mencionó el tema indirectamente, admitiendo que la Iglesia "ha sido herida por nuestros pecados".

Después de momentos de incertidumbre ante la posibilidad de que el vuelo pudiera ser cancelado a causa de la rápida expansión de las cenizas del volcán islandés por gran parte de Europa, incluido el norte de Italia, el avión del Papa partió del aeropuerto de Fiumicino y llegó a Malta poco antes de las 17.00 horas.

La única referencia que el Pontífice hizo al tema de la pedofilia fue en el avión, durante el habitual encuentro con los periodistas, ante quienes el Papa explicó que el pueblo de Malta ama a la Iglesia, que es el Cuerpo de Cristo, "a pesar de que este Cuerpo ha sido herido por nuestros pecados" . Aunque por el momento no consta en el programa oficial, no se descarta que el Papa reciba a un grupo de víctimas de sacerdotes pedófilos durante su visita, que terminará mañana por la tarde.

Por su parte, el presidente de la República, George Abela, salió en defensa de la Iglesia al considerar que "sería equivocado utilizar las reprensibles ligerezas de unos pocos para proyectar una sombra sobre toda la Iglesia".

«La verdadera naturaleza de la familia»

Entre los temas que trató en sus discursos, destaca su petición a la población de Malta para que siga dando "testimonio" frente a "las amenazas contra el carácter sagrado de la vida humana y la dignidad del matrimonio y la familia". De hecho, nada más aterrizar en el aeropuerto, alabó la actitud que este país está demostrando al "defender la indisolubilidad del matrimonio", además de "la verdadera naturaleza de la familia", la defensa "de la sacralidad de la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural" o la "libertad religiosa". De hecho, Malta es uno de los pocos países de Europa donde el divorcio y el aborto todavía no están legalizados.

Asimismo, afrontó el tema de la inmigración, señalando que éste es uno de los ámbitos sobre los que "Malta tiene mucho que ofrecer", así como al "válido papel" que este pequeño país juega en "los debates actuales sobre la identidad, la cultura y las políticas europeas". A causa de su cercanía a las costas africanas, Malta se ha situado en el centro de la polémica por su reticencia a socorrer a los inmigrantes que viajaban en barcazas a la deriva en su intento por alcanzar las costas de Europa.

Calurosa acogida

Desde que llegó a la isla, todos los desplazamientos del Papa estuvieron acompañados de los cantos e himnos de apoyo de miles de personas que se congregaron por las calles y plazas de las ciudades que recorrió.

Uno de los momentos más emotivos fue cuando alrededor de 4.000 niños cantaron al Pontífice, que ayer cumplió 83 años, la canción del 'Cumpleaños Feliz', entre otras. Además de ellos, una multitud de personas llenó la plaza que está situada frente al Palacio presidencial de La Valetta a la espera de que el Papa saliera al balcón para saludarles, después de entrevistarse con el presidente Abela.

Otra etapa importante fue su visita a la gruta de San Pablo , en Rabat, el lugar donde, según la tradición, el apóstol de las gentes encontró refugio tras naufragar en su ruta hacia Roma, teniendo en cuenta que la motivación de este viaje es, precisamente la conmemoración del 1.950 aniversario de este evento.

La gruta es considerada la piedra miliar de la Iglesia en Malta al ser el lugar donde nació la primera comunidad cristiana de la isla. En el Medioevo surgió junto a la gruta un cementerio con diversas capillas, mientras que en 1463 fue construida la primera Iglesia que, posteriormente, sería sustituida por otras dos, la última de las cuales se remonta al año 1653.

Esta es la segunda vez que un Pontífice visita la gruta, después de que Juan Pablo II rezara en ella el 27 de mayo de 1990, con ocasión de su primer viaje a la isla mediterránea.

Ya mañana, el Papa presidirá una misa multitudinaria al aire libre en la localidad de Floriana. Por la tarde, en cambio, mantendrá un encuentro con los jóvenes en el Puerto Grande de La Valletta.

Este viaje es el primero que Benedicto XVI realiza al extranjero desde que empezó el 2010. El Pontífice tiene previsto visitar Fátima (Portugal) en mayo, Chipre en junio, Reino Unido en septiembre y España en noviembre . Asimismo, tiene previstos viajes más cortos a las ciudades italianas de Turín (norte), Sulmona y Carpineto Romano (centro) y Palermo (sur).

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