Hazte premium Hazte premium

Los años de plomo

Los años de plomo

La «x» se resolvió a favor del Periodismo y su principal beneficiario fue «El Norte de Castilla». Delibes entró en la Prensa por la puerta del dibujo, a los 21 años, firmando sus caricaturas como MAX, suma de las iniciales de Miguel, Ángeles, su novia, y X, la incógnita de su futuro juntos. Delibes periodista dejó un reseñable legado en la historia nacional de este género. Formar una incipiente red de corresponsales, promocionar la incorporación de plumas que dieran identidad a la cabecera, lanzar un suplemento de letras y otro de un tema fundamental para la economía regional, la agricultura... fueron algunas de sus iniciativas.

Dibujante, cronista deportivo, editorialista, crítico cinematográfico, crítico literario, Delibes trabajaba desde las siete de la tarde hasta la una y media de la madrugada. En su viaje de novios inicia las «Meditaciones de un solitario», una serie calificada por él como «veleidades literarias». En 1947, el Valladolid asciende a Primera División y Delibes envia crónicas de los partidos a «Vida deportiva», de Barcelona. Revistas como «Destino» y «Cuadernos hispanoamericanos» se enriquecen con su colaboración.

Obligado reposo

En 1950 una amenaza de tuberculosis le obliga a guardar tres meses de reposo. A su vuelta, curiosamente el 23 de abril le dan la sección «Los libros». En 1953 es nombrado subdirector, cargo que le permite de paso ser redactor de primera. Pero los artículos de Delibes son respondidos con amonestaciones desde Madrid. Irritaba a las autoridades nacionales letras tales como las que dedicó a Diego Rivera, que, para la España de entonces, era comunista antes que pintor. En 1958 se convierte en director interino, situación que se prorrogará durante dos años y medio.

«Delibes entiende que el diario es el portavoz desde hace más de un siglo de los intereses agrarios castellanos y no puede permanecer indiferente ante la tragedia que se cierne sobre la región», escribe César Alonso de los Ríos, uno de los jóvenes creadores por los que apostará Delibes.

El caballo de Troya

Las relaciones con la Delegación de Prensa nunca fueron buenas, pero la sombra de este organismo planea sobre «El Norte de Castilla» de manera atosigante. El olvido de destacar la onomástica de Franco va seguido de una orden para poner fin a las crónicas de Rusia y sus países satélites o las que informaban sobre la princesa Soraya.

A comienzos de los sesenta se centra en la orientación informativa, en la línea editorial y en buscar nuevos colaboradores. Le queda ilusión para proponer la Sala de Cultura, encargar un dominical y escribir en su sección, «El caballo de Troya». Incorpora a la redacción a Jiménez Lozano, que entonces dirigía la librería Lara. Ayuda a Umbral, una de sus apuestas que quiere irse a Madrid, libera a César Alonso de los Ríos de la cárcel y aprueba la paga extraordinaria de Navidad para la plantilla.

Su campaña «Plan Tierra de Campos» se corresponde con novelas rurales como «Las ratas», donde cuenta lo que no puede escribir en su diario. Su tesón en la denuncia de la situación agraria le lleva hasta el despacho del ministro de Obras Públicas, quien con más amabilidad que diligencia se interesa por lo que aquel escritor contaba. Se desfonda en ese empeño.

Pisar la raya

Respaldado por el Consejo recupera la dirección del periódico en 1963 y pasa a ser delegado de aquél en la Redacción, puente entre la empresa y los trabajadores. Dos frentes informativos determinarán esta vuelta: el Concilio Vaticano II y la campaña agraria. Hace verónicas a la censura con la política de «pisar la raya sin saltarla» y recupera la palabra «independiente» para su cabecera. Viaja a Estados Unidos en 1964 para impartir unos cursos durante tres meses y a su vuelta inaugura la Sala de Cultura con una conferencia de Julián Marías. La segunda, que debía correr a cargo de Gironella, es suspendida por el gobernador civil.

Delibes nunca dejó de porfiar en su etapa periodística contra el poder, contra el autoritarismo y contra las falsas apariencias de aperturismo.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación