El párroco ofreció su sueldo de profesor de Religión para subsanar la deuda

Tan sólo llevaba unas dos semanas impartiendo clases de Religión en un Instituto de Torrijos cuando las cofradías de Noez echaron en falta el dinero que el párroco se habría gastado en líneas eróticas. Al ser descubiertas sus actividades, rápidamente ofreció su sueldo de docente, de unos 1.800 euros aproximadamente, para subsanar parte de la deuda, que se ha cifrado en unos 17.000 euros.

Al parecer, los propios alumnos tenían las fotos de su profesor de Religión en los teléfonos móviles y se las pasaban unos a otros.

Como informó este diario, el sacerdote toledano, de 27 años, ofrecía sus servicios sexuales en internet, donde se presentaba como «Héctor, hombre hetero español, al servicio de tu felicidad» y «para mujeres y parejas, bien dotado (15cm),..., estoy abierto a todo excepto al sado, no os arrepentiréis, os haré gozar de felicidad como nunca», decía el anuncio, ya retirado de la red.

En su edición digital, este diario informó ayer de que el cura, que también era párroco de Totanés y ha sido destituido de ambos ministerios por el Arzobispado de Toledo, intentó vender por 9.000 euros en internet un cuadro del siglo XVII de la parroquia de Noez. El valor del lienzo, que representa un San Jerónimo, es bastante superior.

En tratamiento

En su anuncio, el sacerdote escribía: «Cuadro de tamaño normal, pintura en lienzo del siglo XVII, de autor desconocido pero perteneciente a la escuela de algún pintor importante de aquella época. Colores tenues con moderados claroscuros. Precio negociable». El anuncio fue publicado el 29 de diciembre de 2009 en una página de internet de donde ya ha sido retirado. Nada ha ocurrido con el cuadro.

Otras fuentes han señalado a ABC que la necesidad perentoria que tenía el sacerdote de grandes sumas de dinero podría deberse a deudas de juego, en concreto póker, pero ese extremo no ha podido ser confirmado.

El sacerdote, que también fue coadjutor de la Iglesia de Santiago el Mayor de Toledo, se encuentra en tratamiento psicológico y podría haber ingresado en algún centro especializado a la espera de un diagnóstico. El pasado sábado por la tarde, dos representantes del Arzobispado celebraron la misa en Noez y dijeron a los feligreses que había que perdonar al sacerdote, que no se encontraba bien y había cometido ese fallo. La reacción del Arzobispado de Toledo, con monseñor Braulio Rodríguez al frente, fue rápida y contundente: en cuanto se conoció el cariz de los hechos, el sacerdote fue apartado de su ministerio.

En lo que respecta a Totanés, la agencia Europa Press informaba ayer que la destitución del párroco ha pasado «desapercibida» en el pueblo y ahora se investigan si faltan bienes en la parroquia. En este caso, las hermandades no quisieron que el párroco formara parte de la Junta Directiva. De momento, no hay denuncias policiales.