Un profesor belga confiesa haber matado a 15 personas

La edad de sus víctimas oscilaría entre los 15 y los 28 años , según la propia confesión del detenido, algunos de cuyos detalles han sido filtrados a la prensa, si bien las autoridades no han ofrecido informaciones concretas sobre este aspecto hasta no disponer de más datos.

La policía está logrando que Janssen confiese con un método de interrogatorio que consiste en halagar sus capacidades para que se sienta orgulloso de todos sus actos y quiera que se conozcan para que sean valorados, añaden las informaciones.

Las autoridades están preparando la reapertura de numerosos casos de asesinato que estaban archivados, aunque el fiscal del distrito de Hasselt, Marc Ruben, declaró a la cadena de televisión RTL que todavía no se ha reabierto ninguno.

En los últimos días, Janssen reconoció su responsabilidad en tres muertes: las dos últimas en Halen (norte de Bélgica) el 1 de enero, cuando mató a tiros a su vecina, Appeltans, de 18 años, y a su novio, Kevin Paulus, de 20, de quien dijo en una declaración policial que "le molestaba".

Asesinato al azar

Interrogado también por la muerte de Van Uytsel, de 18 años, cuyo cuerpo fue hallado en 2007 en un canal dentro de una bolsa de plástico, el profesor admitió haberla matado tras elegirla "al azar". La noche de su desaparición, Janssen la habría obligado a subirse a su furgoneta, incluso con su bicicleta, amenazándola con un arma. Después dijo que la llevó al sótano de su casa, donde la retuvo varios días horas antes de asesinarla.

Algunos amigos de Van Uytsel hicieron saltar la pista sobre Janssen después de explicar que el profesor había acudido a una fiesta de la víctima. Sin embargo, el interrogatorio de Janssen entonces no ofreció pistas a la Policía, que en cambio sospechó abiertamente de él tras el doble asesinato del 1 de enero, ya que Appeltans era su vecina, y del interrogatorio surgió la confesión del sospechoso.

Tanto la Fiscalía de Hasselt como la de Brujas han hecho un llamamiento a las posibles víctimas, testigos y compañeros del asesino a dirigirse a colaborar con la investigación para determinar su implicación en otros posibles crímenes.

De momento, se investiga su posible participación en el asesinato de Ingrid Caeckaert (26), apuñalada en 1991 en Heist-aan-Zee; y en el de Carola Titze, una joven alemana de 16 años, cuyo cuerpo fue encontrado en 1996 en este país.

El confeso asesino en serie está divorciado, es padre de dos niñas de 11 y 8 años y está considerado por sus colegas y alumnos un buen profesor de diseño industrial, labor que desempeña en un centro educativo de Loksbergen (en el noreste de Bélgica).

"Parecía un enseñante modelo, se comportaba adecuadamente con los alumnos", ha declarado el abogado civil Jan Lambert que le representó durante su separación y hasta que confesó los dos primeros asesinatos.

En prisión provisional, Janssen está bajo vigilancia ante la posibilidad de que intente suicidarse.

El detenido ha hablado por teléfono en dos ocasiones con su madre, Hilda Houben, desde su primera inculpación. Houben declaró al diario "Het Laatste Nieuws" que su hijo le ha dicho que no podía explicar cómo había llegado a cometer los asesinatos, excepto que "estaba ciego de cólera".