«España es el país que más está haciendo en la lucha contra la piratería». Así lo ha asegurado el ministro de Fomento, José Blanco, durante su intervención este jueves en el Casino de Madrid en el marco de una nueva edición del Foro ABC. Blanco también ha asegurado, en relación a la crisis del Alakrana, que «el PP utiliza el secuestro para hacer un ajuste de cuentas al Gobierno».

Pese a no ser un experto en el tema, el ministro ha accedido a hablar sobre la reforma del mercado laboral. Blanco ha asegurado que «la situación anterior a 2008 es irrecuperable», pese a lo cual ha asegurado que, en el tema de la reforma laboral, «el Gobierno no va a cambiar el criterio pero hay margen para explorar mejoras en el mercado».

El ministro de Fomento ha asegurado en su discurso que las prioridades de su ministerio van a cambiar a partir de ahora, y que «en los próximos años tendremos que destinar presupuestos crecientes al mantenimiento, la conservación y la modernización de las infraestructuras existentes y presupuestos decrecientes a la construcción de obra nueva».

De esta forma, más mantenimiento y menos construcción es la nueva máxima de Fomento, ya que, según aseguró el ministro, «las infraestructuras de nuestro país están al límite de su expansión».

Por otra parte, el ministro encargado de las obras públicas a nivel estatal aseguró que «la situación anterior a 2008 es irrecuperable; y las políticas económicas correspondientes a ese período también. Nada volverá a ser como antes».

Cajas e Iberia
Pepe Blanco no eludió ningún tema económico de relevancia. Así, respecto a la fusión entre British e Iberia aseguró que «la empresa ha tenido totalmente informado al Gobierno y concretamente al Ministerio de Fomento», a la vez que aseguró que «el Gobierno va a estar vigilando que la fusión cumpla todas las leyes de mercado y competencia», pese a lo cual reiteró que la operación «es positiva para España».

Por último, respecto al proceso de reestructuración de cajas de ahorro, aseguró que «hay demasiada injerencia política» y que Miguel Blesa, todavía presidente de Caja Madrid, le ha asegurado que no hay conversaciones tendentes en crear sinergias.