Los ardores de Polanski

En 1981 una nueva banda de post-punk psicodélico se subía a los escenarios de la Movida madrileña. Se llamaban «Polanski (o Polansky) y el ardor». Aquel nombre hacía referencia a Roman Polanski, un hombre con tantas llagas en su biografía cosmopolita como muestras de ... genio en su amplia filmografía. Por entonces el controvertido realizador llevaba ya tres años huido de los Estados Unidos (1978) tras obtener la libertad condicional por su participación reconocida en un delito de abuso sexual a una menor, además de otros cinco cargos. Su carrera profesional hasta ese momento había sido impactante: nominado a un Óscar a la mejor película extranjera en 1963 por «El cuchillo en el agua»; ganador de los osos de Plata y Oro del Festival Internacional de Cine de Berlín en 1965 y 1966 por «Repulsión» —un drama angustioso protagonizado por Catherine Deneuve—, y «Cul de Sac (Callejón sin salida)» —alocada comedia de gángsteres estrambóticos con la participación del grandísimo Donald Pleasance—; nominado a otro Óscar al mejor guión adaptado por «La semilla del diablo» (1968); ganador de dos Globos de Oro en 1974 y 1979 por «Chinatown» y «Tess», además de haber dirigido teatro y ópera con éxitos notables... Pero también había sufrido el horror de la guerra, cuando vivió de niño mendigando en el geto de Cracovia y parte de su familia, incluida su madre, fue aniquilada en Auschwitz. En 1949 estuvo a punto de caer asesinado. En 1977 su segunda esposa, la actriz Sharon Tate, murió a manos de los sectarios de Charles Manson...