Tras la tormenta política generada por la publicación en ABC de la acumulación de cargos públicos de la esposa del presidente catalán José Montilla, la Diputación de Barcelona se ha visto obligada a puntualizar que no son catorce, sino once. Anna Hernández, funcionaria de carrera desde hace 33 años, es teniente de alcalde y concejal de Relaciones Institucionales, Urbanismo y Vivienda en Sant Just Desvern (Barcelona); presidenta de Promunsa y Proecsa (empresas municipales de Vivienda y Promoción Económica, y representante del Ayuntamiento en la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos y Tratamiento de Residuos.
En condición de concejal, es representante también del Consorcio de Turismo del Baix Llobregat y representante de la Asociación del Plan Estratégico Metropolitano y del Pacto Industrial de la Región Metropolitana de Barcelona. Hernández es diputada y presidenta del Área de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda de la Diputación de Barcelona, y representante de la Diputación a la sociedad del Túnel del Cadí, S.A., en la Comisión Catalana de Tráfico y Seguridad Viaria, y en el Consorcio del Barri de La Mina. Finalmente, ostenta el cargo de consejera general de la Caixa.
Fuentes de la Diputación aseguran que sólo recibe un sueldo como miembro de este órgano provincial. Pese a ello, las críticas a la acumulación de cargos continuaron ayer y se sumaron a las que el número dos de CDC, Felip Puig, y Ciutadans efectuaron el jueves.
Para el diputado del PP, Oriol Millo, esa multiplicidad de cargos supone «un abuso de poder» y «un mal ejemplo para la ciudadanía».

Enviar a:

¿qué es esto?