El dólar, otra piedra en el camino de la recuperación económica española

«Nos interesa un dólar más fuerte, porque penaliza a las exportaciones de países como el nuestro y, sobre todo, de otros más exportadores como pueda ser Alemania, el motor de la Eurozona. Lamentablemente, la política monetaria está fuera del alcance del Gobierno español, por lo que la única manera de fomentar las exportaciones es siendo más competitivos y productivos», asegura Francisco López Ollé, especialista en materias primas y divisas de X-Trade Brokers.

Con esta situación, se complica que una de las esperanzas de la ministra de Economía para apuntalar la recuperación, como son las exportaciones, pueda funcionar con el dinamismo que se espera. Además, aunque el Gobierno americano mantiene oficialmente un discurso de que quiere un dólar fuerte, no está tan claro que esté haciendo acciones efectivas para lograrlo.

¿Por qué está pasando esto? López Ollé puntualiza que no es que el euro se esté fortaleciendo, sino que el dólar está cayendo «como consecuencia del tremendo déficit fiscal y comercial de aquel país y también de las políticas de la Fed, que ha incrementado la masa monetaria, con la consiguiente consecuencia de que traerá inflación», que no es sino la pérdida del valor de la divisa.

López Ollé asegura que «desde la quiebra de Lehman Brothers aumentó la incertidumbre y los inversores se decantaron por los valores refugio. A nivel mundial, en torno al 70% de las transacciones mundiales están denominadas en dólares, por lo que si la incertidumbre aumenta el dólar sufre una presión alcista». Ahora que la incertidumbre y el miedo han bajado se está desinvirtiendo en dólares provocando su caída.

Además, asegura el experto, «el dólar pone cada vez más en entredicho su capacidad como futura moneda de referencia a nivel mundial, y los principales tenedores de dólares están más preocupados por su evolución futura». El experto en divisas considera que «ahora mismo el dólar está en una situación muy delicada y moviendo los mercados más de lo que parece». Y sobre su evolución en los próximos tiempos, asegura que «el dólar volverá a repuntar en el corto plazo» al calor de las correcciones en las bolsas, pero que a largo plazo tiene más posibilidades de seguir depreciándose. En definitiva, es posible que la preeminencia del billete verde como moneda hegemónica esté tocando a su fin.