«Flamenco hoy», el homenaje de Carlos Saura al género

El montaje de Saura ofrece una «reinterpretación» del género y rinde un especial homenaje a grandes figuras como el bailaor y coreógrafo Antonio Gades y los cantaores Manolo Caracol y Antonio Mairena, de quien se celebra el centenario de su nacimiento.

Al pianista Chano Domínguez le acompañarán en la parte musical Antonio Rey y Daniel Jurado (guitarras), Israel Suárez «Piraña» y Sergey Saprychev (percusiones), Marina Albero (salterio, zanfona y teclados), Ernesto Aurignac (saxo y flauta) y Martín Meléndez (bajo y cello), además de siete diferentes cantaores como Alba Carmona, Blas Córdoba o La Tremendita.

En cuanto al baile, bajo la batuta de Nani Paños, que formó parte del espectáculo «Los Grandes» junto a Antonio Canales, y Rafael Estévez, que actualmente dirige y coreografía el espectáculo «Khalo Caló» sobre la pintora Frida Khalo, 18 jóvenes bailarines se subirán al escenario tras tres meses de ensayos de los que Saura, que según ha confesado hoy en rueda de prensa intentó ser bailarín de joven, ha destacado el «gran esfuerzo físico y entusiasmo».

«Flamenco hoy», espectáculo con el que cierra sus puertas este escenario de los Veranos de la Villa y en el que se han celebrado actuaciones y conciertos como el ballet de la Ópera de Munich o la del propio Chano Domínguez, viajará luego por toda España y Latinoamérica.

A través de sus representantes más jóvenes y las influencias de otras culturas, desde aportaciones árabes a lamentos judíos o ritmos africanos, el director de cintas como «¡Ay, Carmela!», «Tango» o «Goya en Burdeos» propone

un «musical flamenco» en el que busca la «armonía entre sus tres vertientes: el cante, la música y el baile, pero siempre con la primacía del baile»

El cineasta aragonés, cuya última película, «Io, don Giovanni», se estrenará mundialmente en el próximo Festival de Cine de Toronto, dirige para esta ocasión a un numeroso elenco de bailaores, cantaores y músicos que, aunando lo tradicional y lo vanguardista, llevan a cabo un esfuerzo por «ir hacia delante y preparar el camino para otros trabajos futuros».

Saura ha destacado también su «querencia por el flamenco» desde su infancia , una afición que, según recordó, le viene desde que escuchó cantar «a los milicianos en la guerra o a los obreros de la construcción» y que le ha llevado a luchar por situar el flamenco en los grandes escenarios y a que se pueda conservar como un «patrimonio excepcional español».

En este mismo sentido, el asesor artístico del espectáculo, José Luis Ortiz, ha afirmado que «el mundo del flamenco debe darle las gracias a Carlos Saura por su constante atención y dedicación a lo largo de tantos años».

Esta propuesta, de más de dos horas de duración y sin hilo argumental entre los diferentes números, abordará gran cantidad de palos flamencos como nanas, sevillanas y tangos; peteneras, farrucas y saetas; fandangos, guajiras y malagueñas; además de seguiriyas, alegrías, bulerías y rumbas.

El espectáculo, que se podrá ver desde el miércoles hasta el domingo , tiene el objetivo de mostrar, según Ortiz, que «la juventud no está reñida con el conocimiento» y de dejar claro que esta «magnífica generación de flamencos idean espectáculos para tener una larga vida», que no son flor de un día.