El Gobierno de Barreda repartió a escolares de diez años un «Quijote pornográfico»

El PP pidió ayer al presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, que cese por estos hechos a la consejera de Educación, a la que hacen responsable del reparto del «kamasutra educativo» -como le denominan-, o que el mismo Barreda pida disculpas públicas. El secretario del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes regionales, Marcial Marín, considera que es una «vergüenza y un escándalo» que la región salga en la prensa por un hecho así.

El PP ya denunció que fue la propia consejera quien repartió el libro a alumnos de 10 años, de 5º y 6º de Primaria, en un acto celebrado el 29 de mayo pasado. Se trata de «Lanza en astillero», una versión de la obra cervantina vista desde el cómic, libro editado en 2005 con motivo del IV Centenario de El Quijote. El PP denuncia el «alto contenido erótico» de las páginas, entre ellas la que ABC publica junto a estas líneas.

Fuentes de la Consejería explicaron que el citado libro -«que quizá no era adecuado para su edad»- se incluyó en unas bolsas con otros regalos que se repartieron a los escolares, y quisieron aclarar que esas escenas son una lucha cuerpo a cuerpo entre Don Quijote y Maritormes. «Queremos reiterar las disculpas para el que haya podido sentirse molesto, aunque hay que aclarar que la rápida reacción del profesorado hizo que los niños no llegaran a llevarse el libro a casa», y se les retiró en el centro escolar.

Interpretación «incorrecta»

La delegada de Educación de la Junta en Guadalajara, Mar Gutiérrez, dijo ayer que la interpretación que el PP hace sobre el supuesto contenido erótico de varias viñetas del cómic es «incorrecta», y pidió disculpas por la alarma que se haya podido generar al respecto. Pero insistió en que el cómic no tiene nada que ver con «un kamasutra ni con nada que se le parezca» y recordó obras de la literatura clásica, como La Celestina o La Regenta, cuya lectura, de acuerdo con la interpretación que hace el PP, habría que prohibir a los jóvenes.

Por su parte, la asociación Profesionales por la Ética ha calificado el libro como «Quijote pornográfico», pues lo que aparece es «sexo explícito» con viñetas «más propias del Kamasutra que de un libro educativo para niños».