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Un arranque de año «catastrófico» para el comercio del libro

Un arranque de año «catastrófico» para el comercio del libro

«Hemos tenido un enero y febrero catastrófico, con unas bajadas que alcanzaron el 40 por ciento». Antonio María Ávila, director ejecutivo de la Federación de Gremios de Editores de España (Feege), avanzaba estos datos en la presentación del Estudio del Comercio interior del Libro en España 2008.

A pesar de que se trata todavía de estimaciones, durante esos meses se registró una devolución masiva en las librerías. Después, las cifras se han ido recuperando. En este sentido, Ávila ha señalado que, aunque la Feria del Libro ha ido muy bien y todavía quedan las campañas de septiembre y Navidad, «estimamos que acabaremos el año con aproximadamente un 6 por ciento de bajada» con respecto a 2008. ¿Y cómo ha sido éste último? Pues el número de ejemplares vendidos ha descendido un 4,1 por ciento comparándolo con el año anterior . Pero la facturación ha crecido un 2 por ciento, ayudada por el incremento del precio medio del libro, que ha aumentado algo menos de un euro por ejemplar (12,45 en 2007 y 13,26 en 2008).

Datos relevantes

Otros datos ponen de manifiesto un ajuste en las tiradas de las editoriales, hasta llegar a 35 ejemplares menos por título que el año anterior. Las cifras también avalan la trayectoria del libro de bolsillo (más títulos y más ejemplares), con una facturación un 3,2 por ciento superior al 2007, a pesar de que se han vendido un 2,6 menos de ejemplares.

En cuanto al comercio exterior, que también presentaba sus datos de 2008, «se ha comportado de la misma forma que el interior en 2009», explica el director ejecutivo de Feege. Es decir, en los dos primeros meses del año las cifras han caído un 10 por ciento . «Hemos detectado una autorestricción de las editoriales, que disminuyen las cantidades de los pedidos originales,preocupadas por el pago. También se enfrentan a que el mercado de Venezuela se ha cerrado y Argentina no sabemos cómo va a responder», indica Ávila. Ambos países suponen una buena parte del mercado exterior.

Con respecto a 2008, el comercio exterior de libros se ha destacado por la caída de la exportación de fascículos (llega al 20,46 por ciento). Además, en las importaciones de encargos de imprenta y coediciones despunta China como país receptor.

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