Un admirador obsesionado ataca con una ballesta a una actriz de TV
La actriz Sara Casanovas
FOTO: EFE
Actualizado Martes, 09-06-09 a las 11:54
La actriz Sara Casasnovas, de 25 años, ha sido protagonista de una historia propia de ficción. El guión lo ha escrito un perturbado admirador, Arndt M., un alemán de 39 años que, desde que la descubrió en el Canal Internacional hace año y medio, se obsesionó con ella hasta el punto de enviarle numerosas cartas de amor.
Su obcecación enfermiza le llevó a viajar durante cuatro días en autobús desde su país para acudir a diario al teatro Reina Victoria, donde la joven representaba hasta el domingo la obra «La noche de la iguana», de Tennessee Williams. Así desde el 2 de junio. Sin embargo, anteayer, día de la última función, decidió dar un brusco giro a su visita. A las 21.30, cuando la artista abandonaba la sala acompañada de dos actores, fue abordada por Arndt M., quien, tras exigirle que contestara a sus misivas y recibir una negativa, se abalanzó sobre ella y la agarró del cuello.
Acto seguido, sacó una ballesta y disparó, tratando de alcanzarla en el rostro. La joven la esquivó y la flecha alcanzó a un empleado del teatro, que tuvo suerte, ya que le atravesó la chaqueta sin rozarle. Sus amigos se echaron encima del fanático, mientras éste se revolvía y rociaba a uno de ellos con un spray.
La aterrada actriz se refugió en una tienda, mientras que entre el personal del teatro y sus compañeros consiguieron inmovilizar al acosador. Un agente libre de servicio de la Policía Nacional, que se dirigía al Congreso de los Diputados, se hizo cargo del perturbado, hasta que llegó el coche patrulla y le trasladó a comisaría. «¡Me quiero morir!», gritaba.
La mochila militar que llevaba contenía todo un arsenal: dos ballestas con sus correspondientes flechas de plástico con punta tipo arpón de 15 centímetros; grilletes; un bote con gasolina; una soga gruesa; otra fina con el nudo del ahorcado en cada extremo, un cúter y el spray de defensa. Una prueba de sus delirantes intenciones, al más puro estilo de la película almodovariana «¡Átame!».
Sara Casasnovas -que ayer no contestó a las llamadas de ABC- explicó a los agentes, ya de madrugada y tras ser atendida de varios golpes y una crisis de ansiedad, que en marzo su fan acudió a verla a Getafe, en donde actuaba, colándose en el camerino. Ella le dejó muy claro que no quería ninguna relación con él. El detenido pasará hoy a disposición judicial y será acusado de tentativa de homicidio, si bien, dado su estado mental, todo apunta a que no irá a la cárcel.

Enviar a:

¿qué es esto?


Más noticias sobre...